En la ciudad brasileña de Sao Paulo, se vivió hoy una jornada de caos, a raíz de la resistencia al desalojo de ocupantes de un hotel abandonado en el centro de la ciudad, que resultó en la detención de al menos 70 personas, en enfrentamientos entre policías y sin techo y en el incendio de un autobús.
Regeneración, 16 de septiembre de 2014.-El conflicto se inició en las primeras horas de la mañana, cuando las fuerzas policiales llegaron al edificio para cumplir una orden judicial de desalojo de las cerca de 200 familias sin techo que lo ocupaban desde marzo pasado.
Un grupo de ocupantes se negó a abandonar el lugar y salió a las calles en una protesta que causó un caos de tránsito en la región e incluyó el incendio de un autobús e intentos de saqueo de comercios.
La policía lanzó bombas de gas lacrimógeno y disparó balas de goma para reprimir la manifestación, organizada por el grupo Frente de Lucha por Vivienda.
Según la Secretaría de Seguridad Pública de Sao Paulo, dos participantes de la protesta fueron detenidos y otras 70 personas que ocupaban el edificio fueron conducidas a la comisaría policial.
El comandante de la operación de desalojo, Glauco Silva Carvalho, defendió la represión policial alegando que los agentes fueron atacados por los manifestantes, y que dos de ellos resultaron heridos: “Hubo grupos que sacaron provecho de la situación y se unieron para atacar a la policía”.
A su vez, la coordinadora del Movimiento de los Trabajadores Sin Techo del Centro (MTSC), Ivonete de Araújo, justificó la resistencia alegando que la empresa propietaria del hotel ocupado no cumplió el acuerdo que disponía el envío de trabajadores y camiones para ayudar las familias a retirar sus pertenencias del lugar “El propietario no cumplió: él prometió 40 camiones y 120 obreros y no los envió. ¿Cómo va a salir la gente? ¿Cómo se llevarán sus muebles? ¿Hacia dónde van? La Justicia no toma en cuenta la cuestión social”, expresó.
(DPA)