*Este texto de Cecilia González fue publicado originalmente en https://actualidad.rt.com/opinion/cecilia-gonzalez/360775-debate-politico-epistolar-mexico-democracia
Regeneración, 22 de julio del 2020.La ofensiva de la clase intelectual mexicana contra el gobierno de López Obrador ha causado un gran revuelo en la sociedad. Desde lejos analistas y periodistas visualizan los efectos de está lucha entre el antiguo contra el nuevo régimen.
Desde la Argentina la periodista mexicana Cecilia Gonzáles describe está confrontación entre los que llama “privilegiados intelectuales” contra el mandatario López Obrador.
González detalla que todo comenzó cuando una treintena de escritores alertó contra «la deriva autoritaria» de López Obrador, acto seguido, convocaron a “defender la democracia”.
Sin embargo, para la periodista “la democracia mexicana no está en peligro”, sino que simplemente que a este grupo de intelectuales no les gusta que gobierne un presidente “al que defenestran por animadversiones ideológicas, y porque a muchos de ellos les dejó de financiar sus proyectos/negocios literarios”.
González precisa que está élite de intelectuales creció bajo el cobijo del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Un partido que en 71 años de gobiernos ininterrumpidos, jamás combatió la pobreza. Por el contrario, enraizó la desigualdad y resistió lo más que pudo la alternancia democrática.
La periodista no se queda corta al decir que además de todo lo anterior, el partido tricolor es la representación máxima de la corrupción en América Latina.
El PRI formó esta cúpula de intelectuales a quienes les financió editoriales y revistas, consideradas de prestigio. Este grupo compacto de intelectuales eran entrevistados recurrentemente por los medios, que los hicieron famosos.
“Los representantes de la cultura mexicana. Conocerlos, escucharlos, leerlos era un deber. Cómo no, si eran los pensadores de la vida nacional”, detalla irónicamente González.
«La democracia mexicana, en realidad, no está en peligro, nomás que no les gusta porque gobierna un presidente al que defenestran por animadversiones ideológicas, y porque a muchos de ellos les dejó de financiar sus proyectos/negocios literarios».
Así mismo, la periodista detalla que estos intelectuales no se caracterizaron por ser críticos a los gobiernos del PRI o del PAN, quienes devastaron al país. Sin embargo, la cuestión ahora es muy distinta contra el gobierno de López Obrador.
En la carta de la ya devastada vieja élite intelectual confrontan al partido del presidente, cuestionan el mal manejo de la política económica y social; incluso del mal manejo de la pandemia y llaman a una alianza opositora para las próximas elecciones.
Los intelectuales hacen un llamado a los ya desprestigiados partidos de la oposición, incluido al PRD al que González considera “el partido que fue la esperanza y más grande decepción de la izquierda mexicana”.
Sin embargo, la escritora considera que muy difícilmente el próximo año los votantes decidan un cambio en el panorama político. Los partidos que planean una alianza han quedado abandonados “por sus promesas incumplidas, sus incongruencias, su corrupción, sus estrellismos que se alejaron por completo de las necesidades de la sociedad mexicana”.
Y para ejemplo de esa intelectualidad corrompida, González menciona a Enrique Krauze, quien hace unas semanas defendió al represor gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro. “Y cómo no iba a salir a justificarlo. Tan sólo el año pasado el gobierno de Jalisco otorgó contratos directos, sin licitación, a las editoriales Vuelta y Clío, propiedad del escritor, por un monto de 5,3 millones de pesos (alrededor de 250.000 dólares)”.
El presidente ha respondido a estas críticas, pese a los ataques que recibe por hacerlo, pues “el presidente también tiene derecho a responder a sus críticos”.
Ante esto, el PRI “con su credibilidad destruida”, describe González, salió a defender a los intelectuales, convocando una lianza opositora para las próximas elecciones… “Habrá que esperar a ver si las y los votantes tropiezan de nuevo con la misma piedra priista”.