Una intervención militar en Siria podría desencadenar una guerra mundial, ha advertido este viernes la ministra italiana de Asuntos Exteriores, Emma Bonino, quien ha reafirmado su rechazo a una opción bélica contra Damasco.
“De un conflicto dramático y terrible, nos arriesgamos a una conflagración, incluso una conflagración mundial”, ha expresado Bonino al canal italiano de noticias ‘SKY TG24’ en medio de las tensiones sobre la inminente amenaza de países occidentales, liderados por EE.UU., con atacar militarmente Siria.
Siempre se empieza así, con ataques circunscritos, ha recordado Bonino para luego agregar que estas medidas unilaterales se llevan a cabo “sin el mandato de la ONU. Claro que Siria reaccionará”, ha asegurado.
“Incluso si es más lento, duro y a veces parece no dar resultado, el ejercicio de la presión diplomática y de la presión política es la única solución que se debe seguir”, ha demandado la canciller italiana.
“Cada país tiene sus procedimientos y todas las decisiones deben ser respetadas, pero la lección que podemos sacar es que hubiera sido útil que los países europeos se hubieran consultado con antelación”, ha subrayado.
Al descartar la participación italiana en una intervención contra Siria, Bonino ha aseverado que incluso con el mandato de la ONU, Roma abriría un debate en el Parlamento antes de decidir su presencia en una operación contra Damasco.
Algunos países occidentales, entre ellos Estados Unidos y el Reino Unido, han adoptado una retórica de guerra contra Siria, bajo el alegato de que el Ejército sirio ejecutó el pasado día 21 un ataque con armas químicas en una zona cerca de Damasco, capital de Siria.
La autodenominada Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y de la Revolución Siria (CNFORS) acusa al Ejército sirio de haber llevado a cabo el mencionado ataque con armas químicas en el que murieron 1300 personas.
Por su parte, el Gobierno y el Ejército sirios han rechazado esas acusaciones y aseguran que no han utilizado armas químicas en ningún punto de su territorio.