Por: Tulix Covarrubias.
El cine gore está caracterizado por violencia gráfica, torturas explícitas en primer plano, escenas llenas de sangre.
Su orígenes remontan al teatro francés Grand Guignol de principios del siglo pasado en las cuales se representaban sangrientas matanzas.
Diversas fuentes opinan que la película que dio origen al cine gore, fue Intolerancia (1916) de David Griffith, en la cual se representan violentas decapitaciones. Sin embargo, poco después a través del Código Hays que buscaba reglamentar que podía ser o no visto en pantallas, llevó este cine a 50 años de censura.
No sería sino hasta la película Blood Feast (1963) de Herschell Gordon Lewis en la cual se veía salpicar sangre, que comenzaría nuevamente este género a abrirse paso entre la población.
George Romero popularizaría el cine gore tiempo después (sí, ese George padre de los zombies) con su película La noche de los muertos vivientes (1968).
Muchos años después, Peter Jackson (el director de el Señor de los Anillos), realizaría la cinta Bad Taste (1987), fue uno de los primeros en enlazar dos visiones: el cine gore y la comedia, proporcionando al espectador una divertidísima comedia gore que trata de un grupo de alienígenas que visitan Nueva Zelanda en busca de carne humana para hamburguesas intergalácticas. Poco después, el mismo director filmaría otro de sus grandes clásicos Brain Dead (Tu mamá se comió a mi perro fue su título en español y fue estrenada en 1992), la cual es considerada una de las películas más sangrientas de la historia.
Otra película de culto para los amantes de éste género, es Holocausto Caníbal (1980), filme italiano que cuenta la historia de un grupo de jóvenes quienes viajan a la selva amazónica, viaje que termina en asesinatos y tortura. Este filme fue prohibido en Italia, Austria y el Reino Unido por su contenido sangriento.
En épocas más recientes, llegaría a las pantallas (en 2007 para ser exactos), la película francesa Al Interior, violenta, salvaje, intensa y con uno de los mejores antagonistas del terror moderno, la trama está basada en el choque automovilístico que haría que una mujer perdiera a su bebé (aún no nacido), así que con deseos de venganza acude a la casa de la culpable del accidente (en la noche de navidad) con la intención de robarle a su hijo (pese a que aún se encuentra en el vientre), lo cual te lleva por una película brutal, feroz y extraordinaria, si eres amante de la violencia explícita en el cine.
Los japoneses no se han quedado atrás y en 2008, en conjunto con los estadounidenses llevaron a las pantallas Tokyo Gore Police, la cual trata de un Japón futurista en la cual la policía está privatizada y se vuelve insensible (cualquier parecido con cualquier realidad es mera coincidencia), además humanos mutantes amenazan al país, pues cada que pierden alguna parte de su cuerpo esta se convierte en un arma letal.
Muchas críticas del cine gore están centradas en la falta de argumento y el exceso de violencia y sangre utilizada a lo largo de los films, sin embargo, esto no es necesariamente cierto, pues en más de una película se ha satirizado acerca de la sociedad actual o la política.
Sean o no fanáticos de estas películas, siempre es bueno conocer un poco de historia.
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