Sólo en la Ciudad de México, el comienzo del uso de drogas está en los 10 años de edad, con alcohol, mariguana y a veces con cristal.
Regeneración, 08 diciembre 2016.- Antonio Luigi Mazzitelli, representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito, advirtió que a México le hace falta “una verdadera política integral de drogas que se traduzca en proyectos y estrategias”.
Aseguró que no basta regular el consumo de la mariguana, regular solo este estupefaciente, se deja a los demás a la deriva, y a sus consumidores con riesgo de ir a la cárcel; dijo que lo que el Senado analizará es una ley sobre la mariguana, cuando debería analizar una ley sobre las drogas.
Durante la inauguración del XVIII Congreso Internacional en Adicciones, donde participan representantes de 45 países, en Acapulco, Guerrero, señaló que “cada año la situación empeora; desde el punto de vista de la oferta de las drogas, está empeorando. Tenemos que ser pragmáticos y realistas”.
Mazzitelli señaló frente al secretario de salud José Narro y el gobernador Astudillo, que los intentos por regular legalmente el consumo de la mariguana en México son insuficientes. Refirió que ha incrementado la producción de hoja de coca en Colombia, de metanfetaminas en México, y la mariguana “siempre más, está en nuestras sociedades y se quedará”, “se espera una oleada de estas drogas en América Latina” dijo.
La oferta de metanfetamina, dijo, sigue creciendo, sobre todo en México y en Los Angeles, California. Asimismo, refirió que en Guerrero se produce 50 % de opio del cual se deriva la heroína que se consume en Estados Unidos.
Carmen Fernández Castro, directora general de los Centros de Integración Juvenil (CIJs), dijo que en la Ciudad de México, el comienzo del uso de drogas está en los 10 años de edad, con alcohol, mariguana y a veces con cristal.
Mazzinelli dijo que en México el debate se limita solo a la mariguana “y esto es insuficiente”, “porque las drogas, cuando son necesarias para el uso medicinal, deben estar disponibles”.
Planteó que en materia de justicia los avances han sido “lentos, muy lentos” con los tribunales de adicciones, que llevan cuatro años y no han podido despegar; por lo tanto “entonces el panorama no es alentador, pero sobre todo, hace falta una política de drogas, que se traduzca en estrategias, sino en proyectos”, dijo.
Con información de La Jornada y Aristegui Noticias.