El libro “Fire and Fury: Inside the Trump White House”, del periodista Michael Wolff reveló que Jared Kushner quiso llegar a un acuerdo migratorio con Peña.
Regeneración, 5 de enero de 2018.- Jared Kushner, yerno del presidente de Estados Unidos Donald Trump, buscó negociar con Enrique Peña Nieto un acuerdo migratorio que incluyera la construcción del muro fronterizo, afirma el libro “Fire and Fury: Inside the Trump White House” (Fuego y furia: dentro de la Casa Blanca de Trump), del periodista Michael Wolff.
Aunque Trump intento impedir su publicación, el libro que salió a la venta este viernes reveló los esfuerzos del yerno de Trump
El libro, que salió a la venta hoy, pese a los esfuerzos del magnate por impedir su publicación, revela los esfuerzos de Kushner por llevar a buen término las políticas de Trump y mediar con la comunidad internacional.
El libro que se agotó luego de unas horas en las librerías de EU, revela que “la negociación para llevar al presidente mexicano Enrique Peña Nieto a la Casa Blanca comenzó durante el período de transición. Kushner vio la oportunidad para convertir el asunto del muro en un acuerdo bilateral sobre migración -por consiguiente, una demostración de fuerza de las políticas trumpianas”.
“Las negociaciones alrededor de la visita llegaron a su punto máximo el primer miércoles después de la juramentación, con una delegación mexicana con funcionarios de alto nivel – la primera visita de un líder extranjero a la Casa Blanca de Trump- que se reunió con Kushner y Reince Priebus. Esa tarde, el mensaje de Kushner a su suegro fue que Peña Nieto había aceptado una reunión en la Casa Blanca y la planificación de la visita podría seguir adelante”.
Pero, dice la publicación, al otro día Trump tuiteó: “EU tiene un déficit comercial con México de 60 billones de dólares. Ha sido un trato unilateral desde el principio del TLCAN con enormes números…” y siguió: “de trabajos y compañías perdidas. Si México no acepta pagar por el tan necesitado muro, entonces sería mejor cancelar la próxima reunión”.
Fue entonces cuando “Peña hizo exactamente eso, dejando la negociación y el arte político de Kushner como una mera mancha en el suelo”, dice el libro.
Wolff señala que Kushner era el “conductor de la doctrina Trump. Sus casos de prueba fueron China, México, Canadá y Arabia Saudita. Ofreció a cada país la oportunidad de hacer feliz a su suegro”.
“En los primeros días de la administración, México echó a perder su oportunidad. En transcripciones de las conversaciones entre Trump y el presidente mexicano Enrique Peña Nieto que luego se harían públicas, estaba claro que México no entendía o no estaba dispuesto a ser parte del nuevo juego. El presidente mexicano se negó a construir la simulación de pagar por el muro, una simulación que pudiera haberle redundado en una gran ventaja (sin que él tuviera que pagar en realidad por el muro)”.
Después, señala, “el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, vino a Washington y sonrió y se mordió la lengua repetidamente. Y eso hizo el truco: Canadá se convirtió rápidamente en el nuevo mejor amigo de Trump”.
Vía El Universal