ADN extraído de piojos de momias revela datos sobre la ascendencia Sudamericana

De acuerdo con los investigadores recuperaron por primera vez el ADN de este “cemento” de los cabellos de restos momificados que datan de hace mil 500 a 2 mil años

Regeneración 31 diciembre 2021. Científicos comprobaron que se puede extraer ADN humano del “cemento” que los piojos utilizaban para pegar sus huevos al cabello hace miles de años.

De acuerdo con los investigadores recuperaron por primera vez el ADN de este “cemento” de los cabellos de restos momificados que datan de hace mil 500 a 2 mil años.

Esto es posible porque las células de la piel del cuero cabelludo quedan atrapadas en la sustancia pegajosa que producen las hembras de los piojos cuando adhieren sus huevos conocidos como liendres.

El ADN antiguo recién descubierto reveló pistas sobre los patrones de migración humana precolombina dentro de Sudamérica.

Este descubrimiento podría permitir el estudio de muchas mas muestras de restos humanos cuando no dispongan de huesos y dientes.

Investigación sobre las momias

Según los investigadores los piojos han acompañado a los humanos a lo largo de toda su existencia. Este nuevo método podría abrir la puerta a una mina de información sobre nuestros antepasados.

Cabe señalar que el ADN antiguo se extraía preferentemente del hueso compacto del cráneo o del interior de los dientes; sin embargo, no siempre están disponibles.

El equipo de investigación extrajo el ADN del “cemento” de liendres de especímenes recogidos de una serie de restos momificados de Argentina.

También se estudió a las liendres del cabello humano utilizado en un textil procedente de Chile y liendres de una cabeza reducida originaria del antiguo pueblo jíbaro de Ecuador.

El análisis del ADN recuperado de las liendres reveló y confirmó un vinculo genético entre tres de las momias y los humanos de la Amazonia de hace 2 mil años.

Esto demuestra que la población original de la provincia de San Juan migró desde las tierras y selvas de la Amazonía en el norte del continente.

De acuerdo con la investigación, la primera evidencia directa del “polimavirus de células Merkel” se encontró en el ADN atrapado en esa sustancia pegajosa de las liendres de una de las momias.