Por Werther Sandoval
Regeneración, 6 de abril del 2016.-La presunción de que sobre los precios del petróleo actúan únicamente las fuerzas del mercado tiene total validez si y solo si tal tesis toma en cuenta que tanto la vulgar mentira como su expresión sutil, la manipulación mediática de la información petrolera, también son variables inherentes a la naturaleza de los mercados.
El planteamiento con mayor peso expuesto por las agencias informativas para explicar la fuerte caída de los precios del petróleo acaecida hasta principios de febrero pasado ha sido la existencia de una sobre producción de crudo por el orden de 1,5 millones de barriles.
La fuente de tal información es la Agencia Internacional de Energía, AIE, creada en 1974 para contrarestar a la Opep y de ineludible seguimiento por reunir a los 34 principales países capitalistas consumidores de energía de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, OCDE, fundada en 1960 en Paris.
La agencia española de noticias EFE reseñó en enero pasado el informe mensual de la AIE publicado en diciembre de 2015 sobre el mercado del petróleo. Dijo que el organismo calculó que la brecha entre la oferta y la demanda será de 1,5 millones de barriles diarios en el primer semestre de 2016, en un escenario en el que Irán incremente su producción en 600.000 barriles diarios para junio.
EFE afirmó respecto a la demanda, que la AIE ha revisado a la baja sus previsiones para 2016 ante la constatación de que el inicio de la temporada de invierno en diciembre ha sido particularmente suave en Europa, Japón y EEUU y, sobre todo, ante una evolución económica peor de lo esperado en mercados emergentes clave como China, Brasil y Rusia.
“El alza del consumo mundial de crudo, que había sido de 2,2 millones de barriles diarios en términos interanuales en el tercer trimestre de 2015, pasó a ser de sólo un millón en los tres últimos”, dijo la AIE.
No obstante, la misma agencia EFE dijo la semana pasada que Irán incrementó en 900.000 barriles diarios sus exportaciones de crudo desde el pasado mes de enero, cuando fueron eliminadas las sanciones sobre su economía, hasta llegar a unos 2,2 millones de barriles al día. Es decir, la sobreoferta pasó de 1,5 millones a 1,8 millones.
«Hasta este pasado mes persa de bahman (21 de enero-21 de febrero), Irán pudo vender 1,3 millones de barriles al día. Pero en los dos meses posteriores al fin de las sanciones, hemos sido capaces de exportar 2,2 millones de barriles de crudo al día», dijo el vicepresidente primero Eshaq Jahangirí, en declaraciones recogidas por la televisión pública iraní.
Tal aseveración iraní pone en duda las cifras de la AIE sobre oferta y demanda de crudo mundial, mas cuando el periódico Wall Street Journal afirmó que «Los fondos golondrina se han tornado optimistas en el sector energético: A pesar de la evidente sobreproducción mundial estos fondos están apostando fuertemente en la subida del precio y en la compra de acciones y deuda de las compañías petroleras”, dice.
Sin embargo, al no ser evidente sobreproducción mundial se deja entrever que la movida de precios ha obedecido más a factores especulativos de los fondos golondrina que a los llamados fundamentos del mercado, oferta y demanda, veta informativa administrada hasta febrero por las agencias para arrastrar los precios a la baja.
De hecho, la supuesta sobreproducción es cuestionada por el mismo Wall Street Journal, al apuntar que “La Agencia Internacional de la Energía habría cometido un error al computar los barriles de petróleo excedentes en el mercado mundial, principal causa de que los precios del crudo hayan descendido”.
El economista Ariel Noyola Rodríguez, citado por la agencia de noticias rusa RT, considera que podría deberse a que las empresas petroleras mienten sobre sus reservas a la Agencia Internacional de la Energía.
«Existe la posibilidad de que la AIE se haya equivocado efectivamente en los cálculos de sobreoferta del petróleo en el mundo, porque en otros años ha errado en sus estimaciones tanto de la oferta como de la demanda», afirma.
Pero quizás la AIE no sea tan víctima de las mentiras de las empresas petroleras. Según el diario AmericaEconomía, la semana pasada Neil Atkinson, director de la división de industria del petróleo y mercados de la AIE, afirmó que un “Un acuerdo entre algunos productores de la OPEP y Rusia para congelar su producción quizás carece de sentido», debido a que Arabia Saudita es el único país con la capacidad de aumentar su bombeo.
Las declaraciones van contra el acuerdo auspiciado por Venezuela y logrado el mes pasado entre Rusia y los miembros de la OPEP Arabia Saudita, Venezuela y Qatar para mantener la producción en los niveles de enero, y que ha incidido sobre los precios del petróleo, cuyo marcador Brent de Londres ha rebotado más de un 50 por ciento desde un mínimo en 12 años que tocó a principios de este año -cerca de 27 dólares el barril-.
El acuerdo ha logrado incluso nuevos adherentes. Qatar invitó a todos los 13 miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y los principales productores fuera del grupo a Doha el 17 de abril para otra ronda de negociaciones a fin de ampliar el acuerdo de congelación.
El ejecutivo de la AIE omite que las exportaciones de petróleo de Arabia Saudita subieron en enero a su nivel más alto en nueve meses a 7,835 millones de barriles por día, desde 7,486 millones en diciembre, mostraron datos oficiales.
El mayor exportador mundial de crudo y peso pesado de la OPEP produjo 10,230 millones de bpd en enero, un nivel récord, frente a 10,144 millones un mes antes, mostraron los datos.
Arabia Saudita no solo tiene poco margen de incremento, sino que propone y se suma al acuerdo de congelar producción cuando sus pozos bombean a su mayor capacidad.