Kenia: Considerada la única jirafa blanca y su cría, fue vista por primera vez en 2017. Solo encontraron sus esqueletos. «Es un dia muy triste»
Regeneración, 10 de marzo del 2020. Kenia: Director de reserva natural al este de Kenía informó del hallazgo de los dos animales muertos a manos de cazadores furtivos.
La Reserva, en el distrito del condado en el este de Kenia, fue la casa de jirafa blanca – la única hembra del mundo, hay otro macho en otro lugar, también en Kenia.
El director de la reserva recordó que fue descubierta en 2017 y tenía un bebé blanco nacido recientemente.
El funcionario aclaró que no se trata de jirafas albinas sino en síndrome llamado leucismo.
Se trata de una condición rar «en la que no solo falta el cuerpo sino pigmentos adicionales».
Hoy la reserva publicó que después de búsquedas y pruebas, tras haber sido buscadas durante mucho tiempo, halló que los cazadores las mataron.
La caza de la jirafa y su cachorro fue señalado por el funcionario como «un dia muy triste».
Esto de acuerdo con los encargados de la reserva de Ishaq Bin Chirola, en Kenia.
“Un golpe a los pasos dados por la comunidad para conservar especies excepcionales y únicas…»
«…, y una llamada de atención para un apoyo continuo a los esfuerzos de conservación”, señaló Ahmednoor.
17 de septiembre del 2019. Nace en Kenia una extraña cebra con lunares en vez de rayas
Cebra con exceso de pigmentación o melanismo, definió un guía del parque, en una de las reservas naturales más famosas de África
Regeneración, 17 de septiembre de 2019. En Kenia, la extraña imagen de una cebra negra con manchas blancas adorna la vista en Masái Mara.
Se trata de una de las reservas naturales más famosas del continente africano.
Al potro lo descubrió Antony Tira, un guía y fotógrafo que trabaja en el parque.
La semana pasada difundieron las primeras imágenes a través de Facebook.
“Al principio pensé que era una cebra que había sido capturada y pintada o marcada con fines de migración. Estaba confundido cuando la vi por primera vez”, dijo el fotógrafo.
Pero luego se percató de que se trataba de un caso muy raro de melanismo.
Esta condición ocurre un exceso de pigmentación oscura en un animal, y es el fenómeno opuesto al albinismo.
En las cebras, el melanismo se manifiesta con rayas y círculos que no logran aparecer del todo, salvo en las extremidades y el cuello.
En el caso de este ejemplar, las manchas parecen lunares y se pueden apreciar en todo el cuerpo, salvo en el lomo.
Tal fue la sensación que provocó el hallazgo de este potro negro que los turistas y los trabajadores del parque se apresuraron a ver el ejemplar, provocando una pequeña estampida.
Aunque hay varios registros de cebras negras en África, éste es el primer caso que se presenta en el Masái Mara.