El Ateneo, participación popular y democrática en Michoacán

El Ateneo Michoacán tiene una orientación ideológica de izquierda, por la participación popular y democrática constante a través del trabajo voluntario.

Por: Javier Lozano*

El Ateneo de Michoacán trabaja por las causas sociales
Regeneración, 19 de junio del 2019. La génesis del Ateneo Michoacán, se fundamentan a través de la organización y la acción académica como mecanismo de crecimiento social y político; esta estructura social, tiene su origen a través de “Juventud Democrática”, grupo que fue el hito y la plataforma de apoyo para estudiantes de nuestro principal epicentro del conocimiento y alma mater: que es la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
El núcleo central y parte de su declaración de principios, el Ateneo Michoacán, tiene una orientación ideológica de izquierda, por la participación popular y democrática constante; pero también, de la necesidad inexorable de atender necesidades de la ciudadanía a través del trabajo voluntario y la gestión social: como instrumento que fortalezca el vínculo de los diversos sectores.
La estructura social del Ateneo Michoacán, radica en un itinerario estricto de principios y valores; así mismo, de convicciones que beneficien siempre a la colectividad. La insoslayable necesidad social-organizativa, como cimiento principal, colocan al Ateneo, como una estructura y movimiento social, cuya dirección se guía: por los procesos y actividades sociales, sindicales y estudiantiles; de esto deviene su actitud y su praxis como consecuencia de su andamiaje ideológico.
El Ateneo Michoacán, parte del clima y del irrestricto trabajo social-político, que permita generar una corriente de opinión, la cual, edifique expectativas de crecimiento, no solo en el campo educativo, sino en el terreno sociocultural.
Esto permite que el análisis y la reflexión, sean concepciones implícitas; por ello, esta organización social, pondera su genética: como un instrumento de participación incluyente, bajo el legado de los procesos que fueron el detonante de cambios sociales y políticos como: la independencia, la revolución Mexicana, y las luchas incipientes para la liberación de los pueblos latinoamericanos que fueron subyugantes a la figura neoliberal.
El Ateneo tiene su universo y principal columna vertebral, a través del pensamiento y la acción de la izquierda, como una interpretación de los grandes movimientos y acontecimientos sociales; y como la reafirmación democrática que permita construir políticas flexibles para la sociedad, ante la desigualdad que ha predominado por la contribución de las políticas de corte capitalista.
Sin embargo, para el Ateneo Michoacán, la pluralidad es un concepto inherente de su quehacer, es decir, esta organización es incluyente en todo momento, y no excluye a cuadros partiditas y apartidistas, movimientos sociales e indígenas, y mucho menos al sector campesino y estudiantil.
Por ello, Ateneo Michoacán se preocupa por la profesionalización a través de una dirección integral: sin sesgos y discriminación; la apuesta por una formación pedagógica y sobre todo humanista, que permita potencializar las capacidades cognitivas, así como teóricas metodológicas del campo científico.
Como consecuencia de lo anterior, el ateneo estructura una dinámica constante de formación instruccional activa, por medio de: diplomados, talleres, cursos y gestión para programas académicos de posgrado.
Ante esta necesidad inminente, la colaboración de sus liderazgos, se basa en el particular proceso de acompañamiento de la enseñanza y el aprendizaje, que se generan en ocasiones por las inflexibles brechas que son producto de la inequitativo desarrollo social.
El Ateneo Michoacán a casi 4 años de haberse constituido, tiene una gran presencia en casi 40 municipios de nuestra mayúscula geografía michoacana; se prioriza que los órganos internos que se formulan por las coordinaciones Estatales y municipales, tengan un desenvolvimiento autónomo a través de los consensos colectivos de una asamblea general.
Es evidente que para que esta estructura social, tenga una dirección que adquiera el compromiso y la responsabilidad de generar condiciones que consideren aspectos y carencias centrales, no se puede soslayar los principios éticos asociados a los distintos ambientes educativos y socioculturales; entre ellos el Ateneo Michoacán pondera:
El desarrollo incluyente que permita erradicar de raíz la discriminación, y por consecuencia: promover la igualdad a través del desarrollo axiológico.
La orientación social, que garantice los servicios educativos públicos de forma gratuita.
La política, como un mecanismo estructural de cuadros que rompan el paradigma de la participación de distintas expresiones, para garantizar la inclusión a las instituciones de la función pública.
La economía: como bienestar humano, considerando la diversidad a la pequeña y mediana propiedad, he impulsado el abanico extenso de oportunidades de inserción al mundo laboral a través de la generación de empleos.
Parte de las características de este núcleo, ha sido el vínculo y la necesidad de dar un giro a los procesos y actividades que visualicen la mejora de nuestro campo social y educativo; ante ello, el programa que estructura el Ateneo Michoacán, parte de la actividad de reforestación y cuidado al medio ambiente; promoción de acceso a la educación superior, como un derecho ineludible; promueve también la igualdad de género; participa en situaciones de contingencia en distintos municipios; y por último, la elaboración de proyectos sociales y productivos que se contextualizan en gran parte de nuestro territorio Estatal.
En la actualidad, el impacto que ha tenido el Ateneo en el Estado, es digno de analizar desde este espacio, porque nos resulta interesante que la participación social: potencialice el desarrollo óptimo en todos los rubros.
Todo esto ha sido posible, por el liderazgo que constituye esta estructura, ya que gracias a ella: se generan propuestas inmediatas que atiendan las necesidades de la sociedad, ante las grandes tendencias de marginación y desigualdad que existen.
Hoy en día, el Ateneo Michoacán avanza conduciendo una visión progresista, pero también incluyente. Este crecimiento se ha dado bajo la gestión y liderazgo del Dr. Oscar Wiliam Márquez Barboza, que en consecuencia ha producido una estructura que pondera las expectativas de la acción colectiva: específicamente en la identificación de los sectores más frágiles y vulnerables, que tienen el mismo derecho universal de recibir educación y beneficios de los programas a través de las políticas públicas.
La participación gradual de sus cuadros, ha generado una transformación sistemática para ir penetrando en causas que han permeado en una sociedad que esta habida de construir un mejor futuro. Esto es Ateneo Michoacán.
En hora buena; una felicitación extensa por su enorme labor social. Se han convertido en una plataforma no solo educativa, sino social y cultural.

*Profesor de Nivel Superior desde hace 9 años. Originario de Morelia, Michoacán. Colaborador del seminario Presencia de Michoacan y los portales electrónicos Changonga.com y Metapolítica.