El porcentaje de los hombres con este tipo de consumo incrementó del 17.9 al 29.4%, mientras que en las mujeres aumentó del 4.6 al 13%.
Regeneración, 25 de julio del 2015 (CNN) —Conoce estos y otros datos destacados en el primer estudio sobre la Situación regional del consumo de alcohol y la salud en América, presentado públicamente esta semana por la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El estudio continental, presentado por primera vez, recoge información de diferentes análisis elaborados de 2005-2010 y 2012.
A continuación te presentamos unos ‘shots de información’ con datos significativo contenidos en este documento.
- Incremento en el consumo
El porcentaje de mujeres y hombres de América que experimentan episodios de consumo excesivo de alcohol, es decir, que toman más de cinco copas al menos una vez por mes, aumentó en cinco años.
El porcentaje de los hombres con este tipo de consumo incrementó del 17.9 al 29.4%, mientras que en las mujeres aumentó del 4.6 al 13%.
En específico en México, también se registró un aumento, pues pasó de 12.6 a 28% en los hombres y de 2.9 a 11.4% en las mujeres, durante el mismo periodo.
- Medalla de plata en el consumo
El continente americano es la segunda región del mundo en donde se consume más alcohol, solo por debajo de Europa.
En promedio, cada persona de América bebe anualmente 8.4 litros de alcohol puro, 2.5 litros menos que en Europa pero… 2.2 litros más que el promedio mundial.
“El aumento en el consumo de alcohol puede adjudicarse a la alta disponibilidad del alcohol en los países de nuestra región, su bajo precio y la gran promoción y publicidad de estas bebidas”, afirmó Maristela Monteiro, asesora en el abuso de sustancias y alcohol de la OPS/OMS.
- Cada 100 segundos, se pierde una vida
En América y en todo el mundo el alcohol es el principal factor de riesgo de muerte y discapacidad para las personas de 15 a 49 años de edad, periodo en el que suelen ser más productivas económicamente.
El uso nocivo de alcohol contribuyó con la muerte de alrededor de 300,000 personas en un año.
Su consumo puede desarrollar más de 200 enfermedades y lesiones, como pueden ser la cirrosis hepática y algunos tipos de cáncer, detalla el informe de las organizaciones internacionales.
Además, el alcohol también hace que las personas sean más susceptibles y menos adherentes al tratamiento de padecimientos como el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) y la tuberculosis, además de ser el principal factor de riesgo de muerte en adolescentes.
- La cerveza, la más querida
En 24 de los 35 países analizados de la región la bebida más popular es la cerveza. Este gusto está presente en 55.3% del continente, el resto tiene preferencia por vinos y otros licores.
México, Canadá, Estados Unidos, Brasil y Paraguay son algunos de los países en dónde la cerveza es la más querida, mientras que en Chile y Argentina prefieren el vino.
- Hablando de mujeres y… alcoholes
Las mujeres beben alcohol cada vez más, casi tanto como los hombres, en muchos países. La “igualdad” en el consumo, sin embargo, conlleva más desigualdad en las consecuencias para la salud.
En México, por ejemplo, el consumo de alcohol en las mujeres incrementó de 2.9 a 11.4% en cinco años.
- El alcohol y los jóvenes
Los adolescentes beben con menor frecuencia, pero ingieren más cantidad en cada ocasión. La mayoría de los estudiantes encuestados en el continente americano tomaron la primera copa antes de los 14 años.
El porcentaje de adolescentes, de entre 15 a 19 años, que consume alcohol de manera nociva representó el 7.1% en mujeres, y el 29.3% en hombres.
- Abstencionismo a la baja
En la región, el índice general de abstencionismo en las mujeres bajó de 27.4 a 26.6% en cinco años y en los hombres de 15.2 a 10.8% en el mismo periodo.
En el caso específico de México, el abstencionismo pasó en mujeres de 64.3% a 31.3% en cinco años, mientras que en los hombres bajó de 37.5% a 12.8%.
- Medidas para evitar el consumo de alcohol
En 2010, la Asamblea Mundial de la Salud aprobó una estrategia mundial que contempla medidas para contrarestar el abuso de alcohol.
Estas van desde el aumento de impuestos en las ventas de alcohol y restricciones en el mercadeo, hasta la capacitación de trabajadores de la atención primaria de salud en detección y tratamiento de los tomadores en riesgo.
Algunas otras consisten en la implantación de límites a la disponibilidad de las bebidas alcohólicas; restricción a la comercialización y la promoción; y el aumento de precios mediante tributación.