Estudiantes de secundaria de Durango toman clonazepam en intento de suicidio colectivo

Uno de los padres de las menores fue quien dio la alerta pues se señaló que eran al menos 8 casos similares.

Regeneración, 1 de septiembre de 2017.- Tres alumnas de la secundaria “ESIMA”, en Durango, tuvieron que ser atendidas de urgencia luego de que, durante la jornada escolar, ingirieran pastillas de clonazepam en un intento de suicidio colectivo.

Tres jóvenes de entre 13 y 15 años de edad, fueron atendidas en el hospital Materno-Infantil de la ciudad.

Uno de los padres de las menores fue quien dio la alerta pues se señaló que eran al menos 8 casos similares.

De acuerdo con Milenio, el jueves pasado dos menores llegaron al área de urgencias, mientras una más fue trasladada a la Cruz Roja.

El doctor Pedro Sánchez, del hospital Materno-Infantil, señaló que una de las jóvenes se quedó en observación y la otra tuvo que ser internada porque tenía el antecedente de la muerte de un ser querido y estaba en proceso de duelo.

“Se sentía mal y al juntarse con este grupito (sic), le dan 4 tabletas, al revisarla se encontró que no hay ideas de muerte, pero si un cuadro de depresión, que puede ser manejado por consulta externa”, explicó el especialista.

Sobre el otro caso, el médico refirió que presenta un cuadro más grave, además que ya tiene un intento previo de suicidio.

“Traía síntomas de intoxicación, por lo que fue internada y salió el pasado martes, este suceso fue a raíz de que una de ellas, quien usa drogas como cocaína y marihuana, fue la que proporcionó el medicamento y a su vez tomó 14 tabletas en el momento y minutos después dos más, por lo que fue un intento suicida de tipo colectivo”, dijo el doctor.

En El Universal, Violeta, madre de una de las afectadas, relató que el jueves 24 por la noche, encontró a su hija en el camión donde regresa a casa después de la escuela y notó que venía en mal estado; preguntó qué le pasaba, y ella le confesó que había tomado tabletas de clonazepam.

La joven confesó que las pastillas fueron facilitadas por una de sus compañeras, quien se las vendió por diez pesos cada una.

 

 

Con información de Milenio y El Universal