Pobreza, inseguridad y corrupción siguen sin resolverse en México: OCDE

México es el país con los tribunales más lentos e ineficaces y además hace uso de la violencia al aplicar la ley, dijo la OCDE.

Regeneración, 31 de diciembre de 2017.- La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) advirtió que, en México, los altos índices de inseguridad, corrupción y pobreza siguen siendo problemas sin resolver.

“El país tiene la tasa de homicidios más alta de la OCDE, y tan sólo el 46 por ciento de las personas se sienten seguras de caminar solas por la noche, muy inferior al promedio de la OCDE, de 68 por ciento”.

Agregó que “la corrupción sigue siendo un problema mayor: más del 60 por ciento de las personas creen que la corrupción gubernamental es generalizada”.

El organismo integrado por 35 países, dijo que, aunque en el país hay instituciones para resolver esas problemáticas, su puesta en marcha aún está en proceso y el Congreso aún tiene pendientes en la materia como el nombramiento del Fiscal Anticorrupción.

Asimismo, dijo que, aunque hay un nuevo sistema penal, México es el primer lugar entre las naciones con los tribunales más lentos e ineficaces y además con un gran uso de violencia al aplicar la ley.

El estudio “Hacia un México más fuerte e influyente. Avances y desafíos de las reformas”, publicado el pasado 12 de diciembre destaca que el mayor foco rojo de México es la pobreza, pues es dos veces más grande que el promedio de las naciones de la OCDE.

En cinco años, las personas en esta condición aumentaron en Chiapas, Oaxaca, Veracruz, Morelos y el Estado de México.

“Aunque la pobreza multidimensional se redujo en 25 de los 31 estados y la Ciudad de México, creció aún más en aquellos que ya tenían altos niveles de pobreza”, señala el documento.

Además, también indicó que en México la salud es un problema, porque sus indicadores “son peores que los de otros países de la OCDE”.

De acuerdo con la OCDE, en México las personas aportan el 41.4 por ciento del costo por atención y medicamentos mientras que en naciones desarrolladas el desembolso de los ciudadanos en salud es del 6.8 por ciento.

 

Con información de Reforma