Hay 12 municipios de Puebla que ha sido concesionado el 100 de su territorio para explotar petróleo mediante la técnica de la fractura hiráulica o fracking. Otros siete ayuntamientos sería afectado más de 90 por ciento de su territorio. Existe rechazo de la población y de ambientalistas porque dichos pozos contaminarían suelo, agua y aire, afectando la salud de la población.
Leticia Ánimas
Regeneración, 1 de mayo de 2016. Huauchinango, Puebla.- Más de 448 mil hectáreas de terrenos ubicadas en 35 municipios de la Sierra Norte de Puebla han sido entregadas por la Secretaría de Energía a empresas nacionales y extranjeras para la eventual extracción de hidrocarburos no convencionales a través de la fractura hidráulica o fracking, reveló un análisis realizado por el centro de análisis PODER.
El área que podría ser explotada a través del fracking, una práctica prohibida en otros países debido a que genera severos impactos al medioambiente y en las comunidades, abarca un total de 448 mil 341.58 hectáreas y representa el 13.07 de la superficie total del estado de Puebla
Se trata de terrenos ubicados en los municipios de Acateno, Atlequizayan, Ayotoxco de Guerrero, Caxhuacan, Cuetzalan del Progreso, Francisco Z. Mena, Hermenegildo Galeana, Huauchinango, Huehuetla, Hueyapan, Hueytamalco, Huyetlalpan, Ixtepec, Jalpan, Jonotla, Jopala, Juan Galindo, Nauzontla, Olintla, Pantepec, San Felipe Tepatlán, Tenampulco, Tlacuilotepec, Tlaola, Tlapacoya, Tlatlauquitepec, Tlaxco, Tuzamapan de Galeana, Venustiano Carranza, Xicotepec, Xiutetelco, Yainahuac, Zihuateutla y Zoquiapan.
Los porcentajes
Doce de estas demarcaciones han sido entregadas en concesión al 100 por ciento como Acateno con 17 mil 9949 hectáreas, Ayotoxco de Guerrero con 10 mil 595 hectáreas, Caxhuacan con 1 mil 38 hectáreas, Francisco Z. Mena con 42 mil 500, Huehuetla con 4 mil 725, Jalpan con 20 mil 426, Jonotla con 2 mil 977, Jopala con 16 mil 905, Pantepec con 21 mil 849, Tenampulco con 13 mil 922, Tuzamapan de Galeana con 4 mil 161 y Venustiano Carranza con 31 mil 397 hectáreas.
Mientras las que tienen un rango de afectación entre 80 y 99 por ciento en su territorio son siete: Cuetzalan del Progreso con 18 mil 38 hectáreas que representan el 93.82 por ciento de su superficie; Hermenegildo Galeana con 5 mil 13 hectáreas, el 80.57 por ciento; Olinta con 6 mil 257 hectáreas el 90.43 por ciento de su superficie; Tlacuilotepec con 17 mil 195 hectáreas que son el 81.56 por ciento.
Además de Tlaxco con 5 mil 435 hectáreas que son el 94.99 por ciento del territorio municipal; Xicotepec con 31 mil 397 hectáreas, el 97.33 por ciento y Zihuatehutla con 17 mil 486 hectáreas que abarcan el 99.71 por ciento del municipio.
En otros, como Hueyapan podrían extraerse hidrocarburos no convencionales en el 67.88 por ciento de su territorio, unas 7 mil 428 hectáreas; en 1 mil 950 hectáreas de Ixtepec que es el 56.81 por ciento del territorio; en el 60 por ciento de la superficie de Zoquiapan, unas mil 901 hectáreas.
En tanto en San Felipe Tepatlán serían afectadas 4 mil 481 hectáreas que representan el 37.05 de su territorio; el 39.27 por ciento de Teziutlán con 9 mil 189 hectáreas; el 27.86 por ciento de Tlaola con 14 mil 190 hectáreas y el 31.82 por ciento de la superficie de Tlapacoya con 6 mil 286 hectáreas.
El resto de los municipios como Xiutetelco, Juan Galindo, Huauchinango y Nauzontla tienen afectaciones que van del rango del 0.40 por ciento al 13.55 por ciento de su territorio.
Las autorizaciones
En mayo de 2016, la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) autorizó la extracción –por 25 años–, de petróleo por medio de fractura hidráulica (fracking) en los municipios de Francisco Z. Mena y Venustiano Carranza, lo que provocó el rechazo de la Alianza Mexicana contra el Fracking que demandó a la Secretaría de Energía la revocación inmediata de las licencias.
Además permitió la extracción de gas shale y petróleo en cinco campos de los municipios poblanos y veracruzanos ubicados en la cuenca Tampico-Misantla donde se ha calculado que existen 1 mil 003 millones de barriles de petróleo crudo equivalente (MMbpce) de aceite y gas de lutitas, por medio de esta técnica que ha sido prohibida –por sus severos impactos al medio ambiente-, en varios países europeos y en algunas áreas de los Estados Unidos.
Los campos de exploración a través de la fracturación hidráulica en Francisco Z. Mena y Venustiano Carranza y en demarciones ubicadas en sus límites con Veracruz, son las identificadas como: AE-0386-M-Miahuapan Agua Fría, Corralillo, Huizotate; Miahuapan, Nuevo Progreso; Tejada y Zapotalillo de la que no se da conocer la superficie y la AE-0388-M-Miquetla-Metlaltoyuca, Miquetla-PR que abarcan 116.57 kilómetros cuadrados (Km2) en el estado vecino y 23.611 kilómetros cuadrados de Puebla.
La CNH ha admitido que carece de la regulación ecológica para las prácticas del fracking, pero “aunque hubiera regulación, las investigaciones confirman que ésta es una práctica inherentemente insegura y no hay forma de evitar los graves daños que ocasiona” como la contaminación de suelo, agua, aire y aumenta el riesgo de sismos, precisó la Alianza Mexicana contra el Fracking.
VER Documental: Sierra Norte Por laVida