Pablo Iglesias dirigente de Podemos entre los 100 mil asistentes al acto de su partido
La Marcha del Cambio: Decenas de miles de personas secundaron la llamada de la formación en una manifestación masiva.
“Soñamos pero nos tomamos muy en serio nuestros sueños”, ha declarado en varias ocasiones el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ante la multitud que se agolpaba en una puerta del Sol, una plaza que, según ha dicho, estaba “otra vez llena de cambio, de dignidad y de valor”. El 2 de mayo de 1808, ha recordado, “no fueron los reyes ni los generales ni los brillantes regimientos del Palacio Real los que se opusieron a la invasión. Fueron los de siempre, los humildes, quienes se enfrentaron a la vergüenza y a la cobardía de unos gobernantes que sólo defendían sus privilegios. Esa gente valiente y humilde está en nuestro ADN, y estamos orgullosos”. Iglesias ha hecho referencia también en este sentido a quienes defendieron Madrid de la ocupación franquista o al 15M.
El líder de Podemos ha sido el último en salir hoy (primero de febrero) al escenario, pasadas las 14 horas, y quienes le esperaban le han recibido entre aplausos, al grito de “¡presidente, presidente!”. Cerca de 300 autobuses han venido desde diversos puntos del Estado -financiados por los propios simpatizantes- y más de 700 madrileños se han organizado para alojar en sus casas a quienes se quisieran trasladar para secundar esta mañana la Marcha del Cambio. Una convocatoria que el propio Iñigo Errejón, secretario de Política de la formación, ha calificado -con cierta ironía- de “extraña”, por ser una movilización en la que no se protestaba ni se reivindicaba una medida concreta. “Demasiado hemos protestado ya sin que nadie nos escuchara. Hoy no venimos a pedirle nada a nadie. Venimos a celebrar que en el año 2015 la gente va a recuperar la soberanía, la gente va a recuperar nuestro país”, apuntaba. También en referencia al año electoral, Errejón ha adelantado que será “un año duro, en el que van a insultar, a atacar, a intentar devolvernos al cinismo”. Por ello, ha pedido a los presentes que recuerden el día de hoy: “Recordad la lección que los humildes le hemos dado a los privilegiados, y nunca más volváis a tener miedo. Recordad que somos muchos y que somos mayoría”.
En el escenario que Podemos ha instalado en la Puerta del Sol, y tras dos horas de una manifestación que ha comenzado a las 12 horas en la plaza de Cibeles y que ha transcurrido por una calle Alcalá abarrotada, en la que a veces era difícil avanzar, Luis Alegre, candidato a la secretaría general de la organización en la Comunidad de Madrid, ha calificado esta fecha de histórica. “Esta plaza no es una plaza cualquiera. No sólo es la plaza a la que la Guardia Civil deberá venir a detener a los delincuentes”, ha dicho, señalando la sede del Gobierno de la Comunidad, «es una plaza en la que hemos reclamado que no se desmantele la sanidad, la educación, que no se eche a nuestros conciudadanos de sus casas conforme a una práctica que sabíamos que era injusta y que ahora sabemos que es ilegal. Esta foto se va a ver en todos los libros de historia”, continuaba.
Cerca de 300 autobuses han venido desde diversos puntos del Estado
Errejón ha llamado a la unidad ante un público que ondeaba las banderas del partido, pero también de todas las Comunidades Autónomas, de todas las luchas sociales. “Venimos también a tender la mano. Vengáis de donde vengáis, confiarais antes en los unos o en los otros, si os indignáis con lo que pasa en nuestro país, si sabéis que las cosas podrían ser diferentes, si sabéis que podríamos tener un gobierno que en lugar de regalarle el dinero a las eléctricas rescatara a sus ciudadanos, sois nuestra gente”.
En todas las intervenciones se ha hecho referencia a distintas organizaciones de la sociedad civil, como la marea blanca, la verde, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, los Afectados por la Hepatitis C; o las luchas laborales, como las de los trabajadores de planta de Coca Cola en Fuenlabrada o los de Telemadrid. Esperanza Jubero, miembro de Podemos e investigadora en Berlín, ha representado a los jóvenes «exiliados» por el paro y la precariedad. “El presidente del CSIC decía que la fuga de cerebros era una leyenda urbana, pero de España se han ido más de 11.000 desde 2010, sin tener en cuenta a los que saltamos al extranjero sin saber lo que es trabajar en España”, señalaba. Según Jubero, dentro de 10 años, la media de edad de los investigadores en nuestro país será de 60 años. “El CSIC se muere de viejo”, ha dicho. Además, ha comparado su faceta profesional con la política: “Nuestro esfuerzo individual es pequeño y efímero, pero la suma de todos esos esfuerzos hace progresar a la sociedad”. Por eso, ha explicado, “y por todos los madres y padres que se resignan al dolor de la distancia, estamos trabajando, desde los cinco continentes, para construir un país al que se pueda volver”.
La convocatoria ha finalizado con la actuación de Rojo Cancionero, que ha interpretado la canción Adagio en mi país -dice mi pueblo que puede leer en su mano de obrero el destino, y que no hay adivino ni rey que le pueda marcar el camino que va a recorrer-. Por último, y con el acompañamiento de los manifestantes, han versionado Todo cambia, de Mercedes Sosa.