Así como el gobierno atendió los reclamos de empresarios y modificó su ley anticorrupción, que revise la reforma educativa, señaló Andrés Manuel López Obrador y propuso cuatro medidas para resolver la crisis: castigar a los responsables de la represión en Nochixtlán, Oaxaca; liberar a los maestros encarcelados; regularizar la situación laboral de los profesores; y convocar a un periodo extraordinario en el Congreso de la Unión para modificar la reforma educativa.
Regeneración, 6 de julio de 2016. Andrés Manuel López Obrador, presidente nacional de Morena, reiteró su llamado al diálogo entre el gobierno federal y la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), en busca de una salida negociada, pacífica, sobre la reforma educativa, y propuso cuatro puntos para resolver la crisis.
El dirigente de la principal oposición al gobierno de Peña Nieto planteó, en un mensaje difundido en redes sociales, que debe darse a conocer la investigación judicial y castigar a los responsables de la represión en Nochixtlán, Oaxaca; tienen que ser liberados los maestros “injustamente” encarcelados; regularizar la situación laboral de los mentores y que se convoque a un periodo extraordinario de sesiones en el Congreso de la Unión para que se realicen las modificaciones correspondientes a la reforma educativa.
López Obrador cuestionó al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, fue un error “lanzar el ultimátum de que iban a utilizar la fuerza”, y afirmó que no conviene “seguir apostando a las vencidas a ver quién gana, el gobierno, (Enrique) Peña o los maestros. Vamos a ganar todos si hay un diálogo, si se busca una salida negociada, pacífica”.
Consideró que si el gobierno toma la iniciativa, “las cosas se van a serenar como por ensalmo. Los maestros van a actuar de manera responsable, como siempre lo han hecho; van a estar a la altura de las circunstancias, se van a terminar las movilizaciones”.
López Obrador aseguró que “no conviene apostar al desgaste, a que pase el tiempo, a la guerra mediática, que la puede ganar el gobierno pero no va resolver el problema. Mucho menos conviene que se quiera resolver el problema con el uso de la fuerza. Eso no”.
Dijo que con el ultimátum del titular de Gobernación, “ahora los instigadores están pidiendo que se actúe, que el gobierno en su conjunto tome la decisión de reprimir, y eso no soluciona el problema”.
Pidió revisar la reforma educativa, como se hizo con la ley anticorrupción: “los empresarios se inconformaron y en el Congreso se revisó la ley. Es lo mismo que se tiene que hacer en el caso de la reforma”, sostuvo.
Resaltó que quiere el cambio por el camino de la concordia, pues está en contra de la violencia. “Ojalá sirva este llamado para que de inmediato se inicie el diálogo, se haga a un lado la simulación. Estar aparentando que se va a dialogar y no se resuelve nada, y se está apostando al desgaste, o a que pase el tiempo o esperando la oportunidad para hacer sentir la fuerza del Estado”.
Eso, resaltó, “no es solución, eso no es política. La política se inventó para evitar la violencia; se inventó entre otras cosas para evitar la guerra, la confrontación. Es el momento de hacer uso de la política”, recalcó.