El hijo de Mirna Medina se dedicaba a la venta de discos y autopartes en una gasolinera de Mochicahui, de donde fue sustraído.
Regeneración, 26 de agosto de 2017.- El fiscal general de Sinaloa, Juan José Ríos Estavillo, confirmó que los restos óseos hallados por las “Rastreadoras de El Fuerte”, Sinaloa, el pasado 14 de julio, corresponden a los de Roberto Corrales Medina, hijo de Mirna Nereyda Medina Quiñones, fundadora de ese colectivo de familiares de personas desaparecidas.
El joven de 21 años desapareció el 14 de julio de 2014. En esa misma fecha, su madre comenzó su búsqueda. Otras madres y familiares de desaparecidos se sumaron, dando pie a la creación de colectivo de las Rastreadoras de El Fuerte.
El hijo de Mirna Medina se dedicaba a la venta de discos y autopartes en una gasolinera de Mochicahui, de donde fue sustraído.
El pasado 14 de julio, para recordar la fecha de la desaparición de joven, su madre convocó a una búsqueda en una zona conocida como Los Muros, en la comunidad de Ocolome, municipio de El Fuerte, sitio donde un informante anónimo les indicó que podrían hallarse los restos de Roberto.
En la búsqueda, a mitad del monte, Mirna Medina y sus compañeras encontraron discos compactos y memorias USB, como las que vendía el joven en la gasolinera. Ese hallazgo les dio esperanza de que sus restos podrían encontrarse cerca.
Las madres cavaron en un punto cercano y localizaron algunos restos óseos, que fueron resguardados por la Fiscalía de la Zona Norte, y llevados a Servicios Periciales de Culiacán, con el fin de obtener su perfil genético y compararlos con los de la familia de Medina Quiñones.
Desde que Medina inició la búsqueda de su hijo, las Rastreadoras de El Fuerte, bautizadas así por el periodista Javier Valdez, han localizado 96 cuerpos, de los cuales han logrado la identificación de 76 personas, restos que han sido entregados a sus familiares.
Con información de Proceso