Pobladores de Bibiano Hernández tomaron la presidencia auxiliar y piden que el alcalde rectifique obra de agua potable que fue rechazada por Semarnat.
Leticia Ánimas
Regeneración, 2 de agosto de 2017. Olintla, Puebla.- Por haber sido rechazado por la SEMARNAT y para evitar impactos negativos al medio ambiente, pobladores de Bibiano Hernández, en Olintla, exigieron al alcalde Abdí Ramírez Pérez rectifique su proyecto para la construcción de una red de agua potable, cumpliendo con los requerimientos técnicos y cerraron la presidencia auxiliar de la comunidad.
Tras aclarar que no se oponen a que se dote de agua a otras poblaciones, sino que tienen el objetivo de asegurar que se logre el servicio que se busca con esta obra, evitando impactos negativos tanto en el abasto de agua, como en los daños al medio ambiente, miembros de la organización Makxtum Kgalhaw Chuchutsipi, indicaron que el presidente municipal no ha demostrado la sustentabilidad de la obra.
Aclararon que en Junio del 2016 la SEMARNAT rechazó una manifestación de impacto ambiental de la misma y prohibió que se realizará hasta contar con los permisos correspondientes, señalando que no se “justifica que con la realización del proyecto no se alterarían de manera significativa las zonas ecológicamente relevantes que posee el cauce… puesto que se estaría aprovechando más del 50% del gasto que tiene el manantial” y tampoco que no se causará desequilibrio ecológico.
Esta, aclararon, “es nuestra principal preocupación ya que los manantiales de donde se quiere llevar agua a otras comunidades abastecen a Bibiano Hernández”.
Indicaron además que los trabajos carecen del permiso de la población que es necesario tal y como lo establece la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) que señala en su página web que para llevar a cabo el Programa de Infraestructura Indígena, del cual forma parte este proyecto de agua potable, es necesario “contar con la aprobación de la población beneficiaria”.
“Esto no se ha cumplido, ya que la construcción del proyecto inició metiendo una máquina en terrenos de personas a las cuales ni se informó y mucho menos se pidió autorización, dañando sus cultivos”, agregaron.
En un comunicado dado a conocer esta tarde desmintieron que pertenezcan a algún grupo político o religioso y reiteraron que lo que buscan es que la construcción del proyecto de agua potable se haga sin violentar los derechos de ninguna persona del municipio, “teniendo la aprobación de la población, dando la información completa y amplia y cumpliendo con los requerimientos técnicos para proteger el medio ambiente y nuestro derecho al agua, así como nuestra identidad ya que el manantial que se podría afectar es un lugar sagrado para nosotros”.
“Consideramos que es conveniente destinar el tiempo necesario a fin de cumplir con lo anterior y no ejecutar una obra que inició violando nuestros derechos humanos, nuestro derecho a la información y participación, dañando cultivos de varios compañeros y difamando a integrantes de nuestra organización”, añadieron.
Los totonakus aclararon que la presidencia auxiliar permanecerá cerrada hasta que las autoridades auxiliar y municipal den a conocer los estudios y autorizaciones con que cuenta el proyecto y garanticen que el abasto de agua para la comunidad de Bibiano Hernández no se verá afectado.