En Twitter y en Facebook han surgido mensajes tales como #IceBucketChallenge para Germán Larrea con el agua del Río Sonora
Por Jenaro Villamil | Homozapping
31 de agosto de 2014.-La contaminación del Río Sonora por la empresa Buenavista del Cobre, del Grupo México, así como la negligente actuación de Pemex en el caso de la fuga de combustible en Cadereyta y su afectación al Río San Juan, han generado una oleada de reacciones en redes sociales.
Ambos hechos confirmaron la vulnerabilidad de los mantos acuíferos del país frente a las empresas mineras y petroleras que crecerá en los próximos años frente a una reforma energética que minimizó los controles y los daños medio ambientales.
La PGR aseguró el viernes las oficinas de Grupo México y la Profepa mantiene su sanción mínima a la empresa de Germán Larrea frente a las afectaciones generadas por el derrame de 40 millones de litros de solución ácida de cobre.
Las imágenes de las personas afectadas dejaron de aparecer en los telenoticiarios. Una nada sutil campaña de “control de daños” de la empresa de Germán Larrea ha comenzado a verse en los medios masivos de comunicación.
Sin embargo, en Twitter y en Facebook han surgido mensajes tales como #IceBucketChallenge para Germán Larrea con el agua del Río Sonora, mientras en el hashtag #GrupoMexico se leen los mensajes en contra de la poderosa empresa: es un “pellizco” los 40 millones de pesos de su multa (apenas 0.1 % de sus utilidades), son “asesinos seriales”, según el obispo Raúl Vera, se piden “sanciones ejemplares” como el retiro de su concesión.
En el caso de Pemex, el director de la paraestatal, Emilio Lozoya minimizó los daños causados por 4 mil barriles de crudo derramados. Según el funcionario “Pemex es el agraviado en esta situación” y no el responsable. El derrame le ha generado 150 millones de pesos de afectaciones a la paraestatal.
Más de 30 derrames tóxicos en dos años
La Comisión Nacional del Agua registró en los últimos dos años un total de 32 derrames tóxicos en cuerpos de aguas federales, según informó David Korenfeld, titular de la dependencia.
Entre los derrames más graves se encuentran:
-Cianuro en Río Jaqui, en Hermosillo, Sonora.
-Hidrocarburos en Agua Dulce, Veracruz.
-Hidrocarburos en ductos de las playas de Mazatlán, Sinaloa.
-Hidrocarburos en la laguna El Limón, en Tabasco.
-Contaminación minera en Los Remedios, Durango.
-Sulfato de zinc, en arroyo Lazarillo, en Nuevo León.
-Cianuro en la mina Proyecto Magistral, en El Oro, Durango.
-Hidrocarburos en presa Marte R. Gómez, en Tamaulipas.
-Derrame de sulfatos y lixiviados en Río Sonora, provocado por la minera Buenavista del Cobre.