DEBO NO NIEGO, PAGO LO JUSTO

 

Guía básica de los deudores con problemas de pago


Si has dejado de pagar al banco tu tarjeta o tu hipoteca, tienes que tomar unos minutos para reflexionar y darte cuenta que los deudores no somos delincuentes, sino más bien víctimas de la banca usurera y de la situación económica que atraviesa el país. Lo primero que hay que saber es que de acuerdo con el artículo 17 de la Constitución, nadie va a la cárcel por no pagar una deuda bancaria o hipotecaria, no amerita prisión.

Debes estar preparado e informado para enfrentar el acoso del banco y de los despachos de cobranza, que llamarán a diario a tu casa y trabajo, harán visitas a tu hogar y enviarán citatorios amenazantes. Ellos no tienen derecho a acosarte, denúncialos.

Recuerda que debes declarar que reconoces tu deuda, pero que pagarás lo justo. El interés legal es del 9% anual, según lo marca el Artículo 2395 del Código Civil Federal. Sin embargo, los bancos manejan intereses superiores al 40% y, en algunos casos, llegan a cobrar hasta el 110%.

Aprende a leer tus estados de cuenta, vale la pena realizar el siguiente ejercicio:

1. Junta TODOS tus estados de cuenta,
2. Suma todas las compras y disposiciones que realizaste,
3. Suma todos los pagos que hiciste. Esto nos permite tomar conciencia del dinero que realmente tomaste prestado ya que los bancos aplican operaciones aritméticas a su favor y nunca vemos disminuir nuestra deuda por más que pagamos.

¡Advertencia! Tener cuidado con las cuentas de débito que se tengan en el mismo banco al que se adeuda, ya que en los contratos incorporaron una cláusula que autoriza al banco el cobro de los pagos atrasados de dichas cuentas. Cuida tu sueldo o tu pensión. Si tienes deuda en el mismo banco en donde tu nómina es depositada, pide en tu centro de trabajo que te paguen en efectivo, cheque o en otro banco.
Hay que dejar constancia de nuestro deseo de pagar lo justo mediante un escrito dirigido a la CONDUSEF, exponiendo la situación, alegando cobro excesivo de intereses y comisiones, y manifestando el monto aceptado como adeudo; no reconocer la cantidad que reclama el banco.

Hay que tener cuidado de no firmar ninguna reestructuración si no hay seguridad en poder pagar, porque entonces sí nos pueden embargar o meter a la cárcel. Es muy importante saber que al estampar nuestra firma estamos renovando adeudos que tal vez ya expiraron, pues los pagarés o vouchers prescriben a los tres años (Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito en su artículo 228 v).

Los deudores no estamos solos. Hay Casas del Movimiento en toda la República que te pueden brindar asesoría gratuita y orientación para promover la organización y la defensa de tus derechos como deudor.

¡ORGANIZATE Y LUCHA!
La usura es un delito, los banqueros son unos delincuentes.
Cuida tu dinero.

León Carballido. Casa del Movimiento

Deleg. Benito Juárez, D.F.