En el hospital La Raza del IMSS un caso causó revuelo, ya que una mujer embarazada fue ingresada, estuvo cinco días y no fue atendida por lo que la bebé que esperaba murió en su vientre.
Regeneración, 11 de mayo de 2018.- Hace unos días en el Hospital La Raza del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) causó indignación el caso de Mitzy Ramírez Jímenez, una mujer embarazada que fue ingresada para ser atendida y dar a luz, pero esto no ocurrió así, estuvo durante cinco días internada y la bebé que esperaba murió en su vientre.
El esposo de Mitzy, Edgar contó en entrevista para El Debate que el sábado 28 de abril a las 09:00 de la noche ingresaron a su esposa en dicho hospital, ya que presentaba contracciones, al llegar a dicho lugar la revisaron y le dijeron que no era de prioridad y decidieron subirla a piso para tenerla en observación, las horas pasaron hasta que llegó el día domingo, parecía que todo iba bien, igual el lunes, pero la noche del martes a Mitzy se le reventó la fuente, ella avisó a gritos lo que pasaba pero nunca le hicieron caso.
La mujer se levantó y fue en búsqueda de alguna enfermera para que le ayudara y solamente le dijeron que era normal, que no pasaba nada que se fuera a acostar que en un momento la iban a revisar cosa que hicieron hasta el día miércoles.
Cuando la revisaron, le dijeron que todo estaba bien, que iban a esperar a ver si ella abría más el canal de parto y le administran indotxina para que empiece a dilatar, se lo pusieron a la 9 de la mañana y le dijeron que si para las 3 de la tarde no le hacia efecto el medicamento le practicarían una cesárea, pero nunca se la realizaron ni se programó.
Cuando Edgar logró hablar con los doctores y encargados del piso en donde se encontraba su esposa, le comentaron que no podrían realizarle la cesárea porque había un desabasto de sangre y no sabían para cuando habría.
A la hora de la visita le dijeron a Edgar que su esposa ingresaría a quirófano, que le tomarían una muestra de sangre pues la habían perdido y por eso no habían realizado los estudios correspondientes, durante ese tiempo Mitzy seguía en la habitación perdiendo líquido amniótico, ya estaba mojada de su bata y sábanas y hasta ese momento no la habían revisado.
Edgar cuenta que se puso insistente para que la atendieran y groseramente lo hicieron, luego le dijeron que escuchaban la frecuencia cardíaca de la bebé, por lo que Mitzy pidió que la programarán y la doctora Sánchez doctora le dijo:
“no no no no, lo tuyo es parto normal, tu bebé aguanta, y si no te vamos a realizar la cesárea, si no tienes el parto normal es porque tu no quieres” y sale de la habitación.
Luego de esto le comentaron a Edgar que la cesárea ya estaba programada para la noche, lo cual no fue cierto, ya que al indagar con la jefa de doctores le comenta que no estaba programada.
“Le pido el favor, por favor mi esposa esta perdiendo liquido amniótico, mi esposa esta en riesgo, mi bebé esta en riesgo”, dijo el jueves a la doctora.
Esta le contestó: “Hay señor no pasa nada la estamos monitoreando, todo esta bien… ya le dije que la voy a programar”.
Horas después le llaman a Edgar de urgencias para darle la noticia de que la bebé no presentaba signos vitales, le dijeron que fue por un problema del corazón por una pequeña mancha que salió en el ultrasonido.
A Edgar querían hacerle firmar una responsiva, pero se negó, por lo que él y su familia decidieron trasladarla al Instituto Nacional de Perinatología.
En esa otra institución médica el trato fue totalmente distinto, les explicaron que la cesárea sería muy peligrosa ya que el bebé tenía horas muerto dentro de ella, si se le practicaba podía contraer una infección en la sangre o desengrasarse en el quirófano y perder la vida, riesgos que jamás les explicaron en el IMSS.
A Mitzy le indujeron el parto por medio de un tratamiento de bomba de indotxina para evitar riesgos, a las 11:00 de la noche parió a la niña sin vida.
“Mi pequeñita ya morada, con los labios casi negros, con llagas en su piel, porque ya presentaba descomposición dentro del cuerpo de mi esposa”, contó Edgar.
El IMSS se excusó diciendo que la bebé presentaba una anomalía en el corazón, en Perinatología los médicos determinaron que la bebé estaba bien, sana, en la necropsia que realizaron no hubo ninguna malformación o algún problema cardíaco, su muerte fue producida por la interrupción de la circulación fetoplacentaria.
Mitzy contrajo una infección fuerte y ahora se encuentra medicada, exigen que se haga justicia.