Tabasco es una llanura inundada que durante miles de años ha recibido los excesos de enormes ríos
Regeneración 9 de noviembre de 2020. Tabasco es una llanura formada por lluvias y ríos desbordados y la deforestación, sobrepoblación y mala planeación urbana son causantes de algunos problemas actuales que viven sus habitantes.
El estado es una llanura inundada que durante miles de años ha recibido los excesos de enormes ríos.
En los últimos cinco años las lluvias estuvieron por debajo del promedio histórico pero este año han vuelto a la normalidad.
La mayoría de la población tabasqueña es inmigrante o descendiente de inmigrantes y vive desconectada de su medio ambiente, pues desconoce cuáles son los ríos, presas, y cómo se conectan entre ellos.
Las inundaciones de los ríos han arrastrado los sedimentos que forman el suelo de Tabaco y el problema no es que la llanura se inunde sino que los lugares donde se han construido viviendas han modificado los cauces de los ríos.
El estado de Tabasco tiene una extensión de apenas 24 mil kilómetros cuadrados y corre entre 28 y 35% del agua superficial del país.
Básicamente el estado es la desembocadura del Grijalva y el Usumacinta. Estos enormes ríos nacen en las montañas de Guatemala y atraviesan Chiapas.
Cerca del 60% del territorio esta a un nivel inferior a 20 metros sobre el nivel del mar.
La altura promedio de 11 de las 17 cabeceras municipales está por debajo de los 20 msnm: Cárdenas 15 msnm, Comalcalco 9 msnm, Cunduacán 10 msnm, Frontera 2 msnm, Huimanguillo 20 msnm, Jalpa 8 msnm, Jonuta 15 msnm, Macuspana 17 msnm, Nacajuca 5 msnm, Paraíso 2 msnm y Villahermosa 10 msnm.
Un terreno tan plano es más susceptible a inundarse, en los territorios con pendientes pronunciadas el agua sigue su camino hacia abajo, pero en un área plana, cuando hay exceso de agua los ríos se “atoran”, y el agua sobrante se extiende hacia los lados del cauce.
En 2007 se registró una gran inundación y desde ese entonces, los sucesivos gobiernos han declarado haber gastado miles de millones de pesos en obras para resguardar la ciudad.
Durante ese año el 62% del territorio tabasqueño se inundó y el 75% de su población quedó damnificada; se reportaron más de 33 millones de pesos en daños.
La causa principal para que se haya inundado fue que en octubre de 2007 se registraron 800 mm de lluvia en Tabasco, casi 4 veces el promedio normal. Es decir, mas o menso lo que llueve en todo un año en el Estado de México.
En 152 años se han registrado 28 inundaciones contando desde 1868 hasta 2020.
Tabasco ha sufrido una inundación grave cada 5.4 años En 5 ocasiones se han tenido dos años consecutivos de inundación y el periodo más largo que ha pasado entre dos de ellas es de 15 años (1980-1995).
En esta gráfica se puede observar la regularidad con la que se han presentado inundaciones durante siglo y medio.
La función de la llanura costera ha sido recibir el agua que transportan los inmensos ríos que nacen en Guatemala y pasan por Chiapas para desembocar en el Golfo de México.
En el diagrama se observa que hay tres grandes ríos (Usumacinta, Río de la Sierra y el Grijalva) que corren desde Chiapas hacia el Golfo de México avanzando por la gran llanura que es Tabasco.
Los ríos que afectan principalmente a Villahermosa son El Carrizal y El de la Sierra. La corriente del primero esta contenida por las presas y fluye por un terreno plano, la última presa antes de llegar a Tabasco conocida como Peñitas.
Cuando las lluvias hacen que las presas acumulen demasiada agua y tengan que liberar de manera rápida el excedente, Villahermosa puede inundarse por el noroeste a través Del río Carrizal.
En el Atlas de Riesgo Oficial de Tabasco se observan los ríos con peligro de inundaciones.
Esta es el área susceptible de ser inundada por las presas:
Estas son las áreas susceptibles de inundarse, el color azul oscuro es más susceptible.
Los niveles de lluvia más altos (en azul oscuro) se dan en la cercanía de las montañas del Norte de Chiapas.
La mayor cantidad de lluvias, los colores rojo, azul y café, se dan justo en una franja horizontal donde terminan las montañas del norte de Chiapas y donde se ubica la última presa del sistema: Peñitas. Es decir, las lluvias más fuertes de toda la región caen justamente arriba de Tabasco, en posición perfecta para escurrir por toda la llanura.
Presas, deforestación y sobrepoblación
En 1966 se inició el Plan Chontalpa, un modelo agroindustrial estadounidense con el régimen ejidal mexicano que operó sobre 91 mil hectáreas y pretendía convertir a Tabasco en el granero de México.
Con este plan se realizaron muchas obras de riesgo, drenaje y control de inundaciones que contribuyeron a alterar los ciclos naturales del agua.
Además se talaron más de 40 mil hectáreas de bosque tropical.
En 1972 comenzó el Plan Balancán-Tenosique que operó sobre 115 mil hectáreas de selva tropical y tenía un enfoque ganadero.
Con ello se amplió la red carretera del estado lo cual hizo posible una mayor expansión ganadera provocando cambios en el uso de suelo, la pérdida de biodiversidad, el aumento en la erosión de los suelos y el agotamiento de agua subterránea.
Ambos planes se abandonaron y a mediados de los años setenta llegó el boom petrolero.
La explosión demográfica generada por un gran flujo de inmigración por el auge petrolero trajo la necesidad de construir un gran número de viviendas en muy poco tiempo y sin planificación.
Como consecuencia, en la planicie inundaba que nunca en su historia había soportado grandes centros de población se empezaron a desecar lagunas, arroyos, vasos reguladores, y a construir en tiempos de seca en lugares que se llenaban en tiempos de lluvia.
Casa vez había más personas viviendo en lugares en riesgo de inundarse, la deforestación y el cambio de uso de suelo para la ganadería y la agricultura modificaron aún más los cauces y las orillas de los ríos.
La pérdida de la vegetación y la construcción a orillas de los ríos hace que el terreno no absorba el agua de lluvia de manera eficiente, y esa agua que no puede ser absorbida aumenta el nivel de los ríos y con ello el riesgo de inundaciones.
Actualmente existe el Proyecto hidrológico para proteger a la población de inundaciones y aprovechar mejor el agua en el estado de Tabasco.
El cambio climático, el retroceso de las costas y el aumento del nivel del mar son fenómenos que ya están afectando a Tabasco, y que se dejarán sentir más intensamente en los próximos años.
El estado de Tabasco ha sido deteriorado, se arrasó con el 98% de sus selvas, sus dos principales cuencas represadas, desviadas y drenadas, sus poblaciones silvestres exterminadas.
Los suelos y aguas contaminados con hidrocarburos y el auge petrolero han destruido el ecosistema provocando severas consecuencias.