California atraviesa la peor sequía de su historia y la NASA advirtió que el estado podría tener reservas hídricas tan sólo para un año más. En medio de esta crisis, Nestlé enfrenta fuertes protestas de consumidores contra su agua embotellada. En una petición firmada por 500 mil californianos, demandan a la empresa dejar de embotellar el agua
Regeneración, 20 de mayo de 2015. La gran sequía de agua que afecta a California, Estados Unidos ha provocado protestas contra Nestlé para pedir a la multinacional que deje de embotellar el vital líquido dada su escasez en ese estado.
California está atravesando la peor sequía de su historia y la NASA advirtió recientemente que el estado podría tener reservas hídricas tan sólo para un año más. En medio de este sombrío panorama, Nestlé está enfrentando fuertes protestas de los consumidores en ese estado contra su agua embotellada.
Los manifestantes buscan entregar a Nestlé una petición firmada por más de 500 mil californianos para exigir que se ponga fin de inmediato al embotellamiento del agua de California.
Tim Molina es uno de los cientos de manifestantes del movimiento ‘The Courage Campaign’ (‘La campaña del coraje’), el cual toma parte en la protesta en las inmediaciones de la planta de agua embotellada de Nestlé en el sur de Sacramento. Paralelamente cientos de personas se reúnen en otra fábrica de Nestlé en Los Ángeles para exigir que se ponga fin a la extracción del agua de ese estado con fines comerciales.
«Será necesario tomar una serie de decisiones difíciles para hacer frente a la sequía», afirmó Molina. «La sequía está empeorando. Nos estamos quedando sin agua. Estamos, literalmente, quedándonos sin agua y si Nestlé y otras corporaciones continúan este negocio como modelo habitual, se terminará», afirmó el activista en declaraciones a ABC.
El pasado 15 de abril se dio a conocer que el Servicio Forestal de EE.UU. descubrió que la multinacional agroalimentaria ha estado haciendo uso de un permiso caducado hace más de dos décadas para bombear agua de un bosque nacional para su negocio de agua embotellada. Una investigación del periódico ‘The Desert Sun’ reveló que el permiso que utilizaba Nestlé para canalizar el agua de un bosque nacional del sur de California expiró en 1988.
En la actualidad California atraviesa por la peor sequía de los últimos diez años, pero ello no ha sido impedimento para que Nestlé continúe haciendo uso indiscriminado de los recursos acuíferos, según denuncian organizaciones ambientalistas.
Los grupos de manifestantes han bloqueado la entrada de la planta de embotellamiento, obligando a la compañía suiza a detener el ingreso y salida de camiones. Y más de 82 mil personas han firmado una petición para que Nestlé deje de extraer agua de un manantial del sur del estado. “Es la peor sequía vista en mucho tiempo, y es una irresponsabilidad por parte del estado permitir a Nestlé embotellar agua que se supone que es un recurso público”, dijo Adam Scow, director de Food & Water Watch en California, una organización sin fines de lucro. “Estamos pidiendo una moratoria en el embotellado de agua para beneficio privado”.
Mientras Starbucks anunció a principios de mes que dejaría de abastecerse en California para elaborar su agua Ethos y trasladará su producción a Pensilvania, Nestlé, el mayor embotellador de agua de EU, se resiste a abandonar sus instalaciones y señala como responsables de la escasez a otros responsables, como la agricultura y la ganadería. «Producir un kilo de carne requiere miles de litros de agua, y mejores prácticas de riego tienen un mayor potencial de ahorro», defiende José López, jefe de operaciones de Nestlé. La compañía consume 4 millones de metros cúbicos de agua, lo que representa menos de 0,008% del uso total de California. “El agua embotellada es un blanco fácil. Está cerca y tiene una marca. El agua es un tema muy emocional”, explica el ejecutivo.
Cobrar por un recurso que fluye prácticamente gratis por las cañerías y que está en peligro de agotarse no es una idea fácil de defender, pero López asegura que los cambios en el desarrollo de las ciudades han convertido al producto que ellos venden en un servicio esencial. “La hidratación es algo absolutamente necesario. La razón por la que existe el agua embotellada es por la urbanización. Las personas se mueven y la infraestructura no les permite abastecerse de agua en todos los puntos”.
El plan de la firma
Para hacer frente a las críticas, Nestlé planea invertir millones de dólares para convertir el agua de desecho de la leche que produce en un líquido que pueda ser utilizado para limpiar sus fábricas, y de paso su imagen corporativa. Instalará nuevos sistemas de filtrado en la planta de Modesto, a 145 kilómetros al este de San Francisco, para reutilizar los desechos de la elaboración de su leche condensada Camation en lugar de vaciarlos al drenaje.
El líquido tratado se usará para limpieza y enfriamiento en lugar del agua dulce local, según López. La remodelación de US$ 7 millones de la fábrica de Camation reducirá el consumo de agua en un 71% cuando se complete la primera etapa el próximo año, detalló el ejecutivo.
La planta ahorrará unos 238 millones de litros por año, el equivalente al 9% del agua que usa Nestlé en el estado para producir bajo las marcas Arrowhead y Pure Life. Estas obras forman parte de un plan más amplio de la empresa suiza para reducir la cantidad de agua que utiliza en todo el mundo en 40% para fines de 2015.
(Con información de La Opinión y RT Actualidad)