Rechazo general a las medidas arancelarias de Trump en la G7; consideran caso clínico

Europa, China, Rusia, Francia y Canadá, se opusieron a la posición de Trump y su administración por aranceles a acero y aluminio durante la G7.

 

Regeneración, 11 de junio de 2018.- Aliados usuales de Estados Unidos mostraron su rechazo general por las medidas arancelarias que tomó la administración de Donald Trump.

Canadá y Estados Unidos se enfrascaron el pasado sábado en una disputa diplomática; mientras los asesores de la Casa Blanca Larry Kudlow y Peter Navarro arremetieron contra el primer ministro francés, Justin Trudeau, Canada respondió que ellos han dicho lo mismo en público y privado.

Todo esto responde al término de la cumbre G7 que terminó en un fiasco tras el giro de Trump contra los aliados.

Antes de irse, Trump, que había avalado el comunicado final, un documento de 28 puntos duramente negociado en el G7 (Estados Unidos, Canadá, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Japón), pero renovó luego su amenaza de imponer un alza de aranceles a los vehículos europeos y extranjeros importados a Estados Unidos, un sector que pesa mucho más que el del aluminio y el acero afectado hasta el momento.

La reunión no venía bien, pero explotó tras el retiro anticipado de Trump de la cumbre con la excusa de que tenía que llegar a tiempo para la reunión con el norcoreano Kim Jong-un en Sinpagur, y más tarde un tuit en el que Trump indicó: “El comercio justo se llamará ahora comercio bobo si no es recíproco”.

Las reacciones no se hicieron esperar, Francia dicen que Estados Unidos actuó con “incoherencia”. Alemania consideró “deprimente” el comportamiento de Donald Trump.

“Con riñas de este nivel, no era de extrañar que la reciente cumbre del G7 profundizara una grieta ya demasiado visible entre sus integrantes, nada menos que los siete países más desarrollados del mundo”, señaló El País.

En tanto, la canciller canadiense, Chrystia Freeland, respondió que los ataques ad hominem no ayudan en la relación entre países, al tiempo que aseguró que “la postura de nuestros socios europeos y de Japón coincide con la nuestra, estamos en una coordinación estrecha con la Unión Europea (UE) y México sobre la lista de las medidas en respuesta (a los aranceles)”.

El gobierno francés señaló en un comunicado que “la cooperación internacional no puede depender del enojo o de palabras menores” y aseguró que se mantendrá la declaración firmada en Canadá.

La canciller alemana, Angela Merkel, enfatizó que “la retirada mediante un tuit (de la firma de la declaración del G-7) es sin duda decepcionante y un poco deprimente” y que la UE responderá ante las medidas arancelarias de Trump.

El presidente ruso, Vladimir Putin, señaló ante periodistas que se trata de un “parloteo creativo”.

En la Organización de Cooperación de Shanghai, el presidente chino, Xi Jinping, rechazó las políticas “egoístas y miopes” de Estados Unidos, volvió criticar a Washington por la imposición de aranceles contra las importaciones de productos de la nación asiática y pidió enfrentar el proteccionismo comercial.

De esta manera, las tensiones con la administración de Trump no ceden y algunos medios incluso señalan una posible afectación mental del mandatario estadounidense.

“Como no llevan a ningún lado los análisis políticos y económicos sobre las decisiones de Trump, cada día los expertos se ocupan más de su sicología. Según esto, torpedeó la reunión con sus aliados del G-7 en Canadá porque quería sentirse poderoso en la reunión con el líder norcoreano Kim Jong-un en Singapur”, consideró Enrique Galván Ochoa en su columna.

Vía La Jornada y El País.