Para el vocal del Consejo Mexicano para la Acreditación de la Educación Médica (COMAEM), esto se debe a que no todas las instituciones de educación superior de las que egresan tienen acreditados sus programas de estudio.
Regeneración, 20 de agosto de 2017.- El año pasado, de los 36 mil 408 doctores que realizaron el Examen Nacional para Aspirantes a Residencias Médicas (ENARM), casi el 80 por ciento obtuvo un resultado desfavorable.
Más de 28 mil que no consiguieron ingresar a una especialidad sacaron 5.8 de calificación, mientras que los 7 mil 810 que obtuvieron un lugar, lo hicieron con una media de 7.5, de acuerdo con cifras de la Dirección General de Calidad y Educación en Salud de la Secretaría de Salud (Ssa).
Para el vocal del Consejo Mexicano para la Acreditación de la Educación Médica (COMAEM), José Ángel Córdova Villalobos, esto se debe a que no todas las instituciones de educación superior de las que egresan tienen acreditados sus programas de estudio.
«Esto se va a poner cada vez más grave y peligroso, pues habrá más (escuelas) no acreditadas que acreditadas», advierte el ex titular de la Ssa.
«(Los egresados) después serán jóvenes que, tras seis o siete años de carrera, no pasarán el examen de residencias y no encontrarán trabajo, más que poner su consultorio. Quién sabe cómo hayan salido porque vienen de una escuela sin acreditación”.
Cabe mencionar que, en la actualidad, en el país existen 160 escuelas de Medicina con Reconocimiento de Validez Oficial de Estudios (REVOE), de las cuales sólo 70 están acreditadas ante el COMAEM.
Aunque la Norma Oficial Mexicana NOM-234-SSA1-2003 establecía que los campos clínicos únicamente debían ser utilizados por instituciones educativas que cuenten con planes y programas de estudio de la licenciatura en medicina acreditados o en proceso de acreditación, al publicarse la
NOM-009-SSA3-2013, se fijó que estos espacios pueden emplearse por instituciones de educación superior que preferentemente tengan planes y programas de estudio con acreditación vigente.
Por ello, “(La acreditación obligatoria) era un freno para que no proliferaran tanto las escuelas de medicina; sin embargo, se hizo una modificación a esa norma en donde se agrega la palabra ‘preferentemente’, ahí le parten el queso a todo, porque entonces preferentemente acreditados (incluye) pues los que no estén también», dijo Córdova Villalobos.
Si un recién egresado estudió un programa de Medicina acreditado tiene más probabilidades de aprobar el ENARM, de acuerdo con el análisis Acreditación y Resultados de la Educación Médica en México, elaborado por María Ortiz y Domingo Vázquez, médicos investigadores de la Universidad Veracruzana.
Por ejemplo, para ingresar como practicante al Centro Médico ABC es indispensable haber egresado de un plan de estudios certificado, señala Diana Gómez, coordinadora de Vinculación y Reclutamiento del hospital.
«La idea del hospital, al tener estudiantes, es que sea un semillero de talento que se va a quedar en un futuro a mediano o largo plazo con nosotros, pero, si desde el inicio la formación no está alineada a lo que buscamos, ¿para qué hacer que una persona esté aquí?», dice.
Por su parte, Víctor Torres, vicepresidente de la Academia Mexiquense de Medicina (AMM), expuso que asegurar que los médicos cuentan con la preparación y las actualizaciones necesarias tendría que ser indispensable.
«Los médicos generales están haciendo su trabajo, necesitamos la certeza de que su trabajo lo están haciendo bien. En promedio, no toman ningún curso de actualización, esto impactará en un mal diagnóstico y tratamiento”.
Con información Reforma