Sergio Cabral, miembro del Partido de Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), habría recibido dinero ilícito de forma regular. El exgobernador fue detenido en noviembre de 2016 por recibir 2.7 millones de reales (850 mil dólares) de empresas constructoras que participaron en la licitación fraudulenta del controvertido Complejo Petroquímico de Río de Janeiro.
Regeneración, 13 de junio de 2017.- Sergio Cabral, ex gobernador de Río de Janeiro y ex senador brasileño fue condenado a 14 años y dos meses de prisión en una primera sentencia contra él, por los delitos de corrupción y lavado de dinero en el marco de la Operación Lava Jato.
El exgobernador fue detenido en noviembre de 2016, y las autoridades lo condenaron por recibir 2.7 millones de reales (850 mil dólares) en 2008 de empresas constructoras que participaron en la licitación fraudulenta del controvertido Complejo Petroquímico de Río de Janeiro, comúnmente denominado Comperj en Brasil.
Entonces, su esposa, la periodista Adriana Alcelmo, también fue aprehendida, pero logró un recurso para esperar en detención domiciliar las sentencias contra ella y su esposo, más tarde fue absuelta por “falta de pruebas suficientes”.
El Comperj es uno de los grandes ejemplos del impacto del esquema de corrupción entre constructoras y partidos políticos en Brasil revelado por la Operación Lava Jato.
En marzo de 2008, la obra fue inaugurada y a partir de 2013 debía albergar una refinería de petróleo, una planta de gas y otra petroquímica en un inmenso espacio de 45 kilómetros cuadrados en Itaboraí. Sin embargo, pese a la inversión multimillonaria la obra jamás fue terminada por Petrobras.
Cabral, miembro del Partido de Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), habría recibido dinero ilícito de forma regular durante sus dos mandatos, entre 2007 e 2014, según la policía y la fiscalía brasileñas.
La condena del ex senador es la primera sentencia de una de las varias causas contra el ex gobernador, sospechoso también del desvío de 224 millones de reales (70 millones de dólares) en contratos con empresas constructoras que participaban en Río de Janeiro en obras públicas, entre ellas la reforma del estadio de futbol Maracaná por la Copa del Mundo de 2014.
Lava Jato, la operación iniciada hace tres años para investigar una red de corrupción en la petrolera Petrobras, salpicó a la élite de la política brasileña cuando la Corte Suprema autorizó la investigación de 97 autoridades con fuero privilegiado.
Con información de Notimex