Es indispensable que el papa Francisco pase de las palabras a los hechos y tome las medidas necesarias para resarcir el daño a las víctimas y enjuiciar a los responsables. Pedir perdón no es suficiente, expresaron medios, organizaciones y analistas
Regeneración, 21 de agosto de 2018.-El perdón pedido por el papa Francisco a nombre de la Iglesia católica por los casos de pederastia ocurridos durante décadas a manos de sacerdotes, ha causado furia entre las víctimas.
De acuerdo con AFP, ni Juan Pablo II ni Francisco han aplicado la política de “tolerancia cero”, una de las promesas que la Iglesia católica ofreció junto con múltiples pedidos de perdón por los abusos sexuales de sus sacerdotes.
Las víctimas de estos delitos exigen pasar de las palabras a los hechos, por lo que el reciente pedido de perdón del papa Francisco fue tomado con rabia e indignación.
Francesco Zanardi, de la Red El Abuso, la asociación italiana de víctimas de curas pederastas dijo a AFP: «Basta, basta, basta. El papa (Jorge) Bergoglio nos está tomando el pelo. Estoy realmente indignado, irritado».
Por su parte, el vaticanista Marco Politi expresó que: «Le llegó el momento al papa de actuar como máximo legislador, tal como indica el código de derecho canónico.”
La carta del papa Francisco
Como informamos a través de Regeneración el pasado 20 de agosto, con la intención de apoyar “todas las medidas judiciales que sean necesarias”, el papa Francisco pidió perdón a nombre de la Iglesia católica y expresó su vergüenza por los abusos sexuales cometidos por sacerdotes en contra de más de mil víctimas menores de edad sucedidos en Pensilvania durante siete décadas con la anuencia del Vaticano.
En una carta dirigida al pueblo de Dios, es decir, a la comunidad católica del mundo, el jefe del Estado Vaticano habló de la gravedad en el “abuso de poder y de conciencia cometidos por un notable número de clérigos” que produjeron el sufrimiento de menores de edad.
La agencia AFP fue clara:
“El fenómeno de la pedofilia dentro de la Iglesia sigue siendo la gran espina del pontificado de Francisco, quien no logra atajar, ni castigar con la severidad prometida a los curas abusadores ni a sus encubridores.”
El diario Il Fatto Quotidiano también exigió al papa Francisco adoptar medidas concretas: «La carta no frena la rabia, la indignación, el disgusto que sienten los católicos de casi todo el mundo (…) los cuales piden más, esperan normas concretas, que cambien los mecanismos», publicó hoy.
Las críticas hacia el Vaticano han llovido. David Gibson escribió en The New York Times que “ahora, el escándalo ha hecho que incluso algunos de los más fervientes partidarios de Juan Pablo II cuestionen cuán certera fue la decisión de canonizarlo en 2014, y los mismos casos atormentaron al papa Benedicto hasta su sorprendente renuncia en 2013.”
Y no es para menos. Zanardi, quien representa a más de 700 víctimas italianas dijo a AFP con frustración: «Le hemos pedido mil veces al papa una sola cosa: que obligue a los obispos a denunciar los casos ante la autoridad judicial. No queremos procesos canónicos.»
«Las peticiones de perdón, aunque sean sentidas y obligadas, como en este caso, no son suficientes. Hay que pasar a los hechos. Hay que cumplir la penitencia», escribió por su parte José Manuel Vidal, fundador de la página especializada en español Religión Digital.
«El papa ha dicho palabras fuertes contra los curas pederastas, pero nada ha cambiado», comentó a la AFP el periodista italiano Emiliano Fittipaldi, autor de un extenso libro sobre la pederastia y la pedofilia en la Iglesia.
Para el periodista conocido por sus investigaciones, «las palabras revolucionarias de Francisco son insuficientes, hay que pasar a los hechos».
«La Iglesia debe hacer una limpieza real y valiente de todos, inclusive de los amigos del pontífice y de los encubridores», expresó Fittipaldi, quien citó los escándalos más recientes en Chile, Australia y Estados Unidos, donde algunos prelados siguen en sus cargos.
Tanto Politi, como Fittipaldi y Zanardi solicitan un paso clave al papa: que abra los archivos de la Congregación para la Doctrina de la Fe, a donde llegan las denuncias internas. Requieren que el máximo representante de la Iglesia católica “adopte una ley que obligue a las conferencias episcopales a denunciar los casos que le llegan ante un tribunal judicial local.”
Otro requisito ineludible, que pocos quieren abordar es el pago de indemnizaciones a las víctimas, tal como se hizo en Estados Unidos.
«Y si eso significa que la institución tiene que arruinarse, que se arruine. Y si tiene que vender palacios, iglesias y hasta el propio Vaticano, que lo haga. Vale más la vida de un inocente que todas las riquezas eclesiásticas acumuladas durante tantos siglos», sentenció Vidal.
Algunos observadores, como la escritora canadiense Nancy Huston, piden también que se aborde un tema por ahora tabú: el celibato y la sexualidad para que no sea más reprimida con sus desastrosas consecuencias.
El papa Francisco se reunirá con víctimas de Irlanda
El representante del Estado Vaticano se reunirá en privado este fin de semana con víctimas durante su visita a Irlanda este próximo fin de semana, dijo el martes a CNN el director de la oficina de prensa del Vaticano, Greg Burke.
El arzobispo de Dublín, Diarmuid Martin, ha pedido al Papa Francisco «hablar abiertamente” sobre los numerosos casos de abusos sexuales que representantes del catolicismo, en diversas partes del mundo, cometieron contra menores de edad.
En su homilía del domingo, Diarmuid señaló que «no es suficiente decir lo siento. «Las estructuras que permitieron o facilitaron el abuso deben ser destruidas y destruidas para siempre». El Pontífice debe «hablar abiertamente sobre nuestro pasado, pero también sobre nuestro futuro», demandó.
Con información de AFP, The New York Times, CNN, Religión Digital, El Periódico e Il Fatto Quotidiano