Regeneración, 16 de noviembre del 2015.-Si eres de los maniáticos que no toleran que el otro mastique ruidosamente a tu lado no te preocupes, no es la neurosis, probablemente sea tu cerebro muy creativo.
Tampoco estás solo: muchas personas que recibieron la etiqueta de “genio” muy a menudo reportan molestarse enormemente por el ruido, como Charles Darwin, Marcel Proust, y Antón Chejov.
Una investigación realizada por la Universidad de Northwestern descubrió que existe una relación entre la creatividad y la incapacidad para filtrar los ruidos irrelevantes. El estudio que fue publicado en Neuropsychologia en marzo, observó los vínculos entre pensadores creativos y niveles de “entrada sensorial”, el proceso neurológico involuntario que filtra los estímulos innecesarios o irrelevantes.
Los investigadores pidieron a 97 participantes que llenen un cuestionario llamado Cuestionario de Logros Creativos que evalúa sus logros en el mundo real en varios ámbitos creativos. También se les pidió realizar una prueba de pensamiento divergente, técnica muy utilizada en laboratorios que evalúan la cognición creativa.
En una prueba separada, los participantes tocaron una serie de pitidos cortos mientras que los científicos midieron la actividad cerebral, grabando la respuesta neurofisiológica involuntaria que se produce 50 milisegundos después de un estímulo auditivo. Analizando toda esta información mostró que las personas creativas son más sensibles al sonido distractor. El estudio sugiere que las personas con entrada sensorial «agujereada» tendían a ser más creativos, ya que tienen una capacidad de desplegar la atención sobre un rango más amplio de estímulos. Este aumento de la entrada puede conducir a una experiencia más rica y matizada, que también puede ayudar a perfeccionar su capacidad para crear asociaciones con conceptos o ideas distantes. Ya que las «fugas» entrada sensorial ocurre en el procesamiento cerebral y puede ayudar a las personas a integrar ideas que están fuera de su principal foco de atención, una menor capacidad para filtrar las cosas irrelevantes pueden dar lugar a la creatividad en el mundo real, dijo Darya Zabelina, autor principal del estudio, en un comunicado. Y añadió: «Si se canaliza en la dirección correcta, estas sensibilidades pueden hacer la vida más rica y significativa, dando experiencias más sutiles.» Por supuesto, con menos de 100 participantes, este es un estudio demasiado pequeño como para sacar conclusiones lo suficientemente amplias. Por otra parte, la creatividad es una cosa muy subjetiva para medirse y no necesariamente algo que un cuestionario puede capturar.
Traducido dede IFLS (http://www.iflscience.com/brain/easily-distracted-noise-you-could-be-creative-genius)