El arzobispo José Luis Chávez Botello ha entorpecido las investigaciones de la violación del sacerdote al joven de Oaxaca
Regeneración, 15 de agosto de 2016.- El sacerdote Carlos Franco Pérez Méndez, acusado de haber violado al catequista Lenin Moisés López Jiménez, de 19 años, sigue libre a pesar de que existen pruebas en su contra.
«Tenemos todas las pruebas, pero el padre Carlos Franco sigue libre e incluso lo van a colocar en otra parroquia. Lo que tememos es que siga violando. No queremos que siga ocurriendo esto en la diócesis de Oaxaca, que siga dañando, pero lo están protegiendo», dijo Lenin Moisés, víctima del abuso.
El arzobispo José Luis Chávez Botello ha entorpecido las investigaciones de la violación del sacerdote a los jóvenes; se ha negado, por ejemplo, a entregar las grabaciones de la cámara de vigilancia en el lugar de la violación. «no aceptó que se hicieran las averiguaciones dentro de lo que es el curato de catedral», dijo el joven.
«Las autoridades lo están protegiendo; sólo estuvo tres días en la cárcel».
Crónica del abuso
Lenin Moisés dio una entrevista para La Jornada, donde narra la violación.
De acuerdo con el catequista, Méndez les había servido un mezcal a él y a su compañero menor de edad. Los dos comenzaron a sentirse mareados.
Lenin Moisés notó que el sacerdote acariciaba la pierna del menor de edad y lo encaró; llevó al menor de edad a su cuarto e impidió que el sacerdote pudiera entrar.
«El padre Carlos Franco quería entrar al cuarto y no lo dejé. Le reclamé, discutimos, forcejeamos y me pegué en la cabeza con la esquina de la puerta porque me sentía muy mareado. Perdí la conciencia, pero seguía forcejeando con él. Luego fue cuando pasó todo».
Lenin Moisés asegura haber despertado sin camisa, con los pantalones desgarrados a la rodilla, varias contusiones, una costilla rota, un fuerte dolor de testículos y un terrible desgarramiento anal que no le permitía caminar o sentarse.
El sacerdote Carlos Franco ha cambiado sus declaraciones, primero dijo que tuvo sexo consensuado, luego que encontró a Lenin y su compañero teniendo relaciones y después lo negó todo.
El pasado 21 de julio, Méndez fue encarado por ciudadanos que le dijeron que debería de dar gracias a Dios de estar ahí, porque de esa forma podrían enfrentarlo. “Yo soy la mamá de una de tus víctimas”, mientras algunas voces lo calificaban de traidor y violador.
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Con información de La Jornada.