Aunque el ex gobernador dijo que harían una inversión ‘sin precedente’ en el campo, los recursos nunca llegaron.
Regeneración 16 de agosto de 2017.– La inversión “sin precedente” en el campo durante la administración de Roberto Borge en Quintana Roo, desapareció misteriosamente a través de un “programa fachada” y la falsificación de comprobantes.
El anuncio de los apoyos, hecho en 2013, nunca se hizo efectivo, pues en los ejercicios presupuestales de 2015 y 2016, se hizo la simulación de la entrega de recursos, pero en realidad, se desviaron mil 522 millones de pesos en 2015 y mil 850 mdp para 2016.
En el Decreto de Presupuesto de Egresos 2015 aprobado por el Congreso local, se autorizó a la secretaría 310.1 millones de pesos, mientras que para 2016 los recursos avalados fueron 273.1 mdp.
En ambos años, el gobierno de Roberto Borge, a través de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), autorizó ampliaciones presupuestarias millonarias para la dependencia. Para el 2015, los recursos crecieron a 1,806.6 mdp (549% más), mientras que para el 2016 el presupuesto ampliado llegó a 2,031.7 millones de pesos (555% más).
Pero el desfalco va más allá pues Rafael del Pozo, titular de la Contraloría del estado, estimó que la cantidad de recursos para el campo en la que detectaron irregularidades es de cerca de 5 mil millones de pesos.
Este dinero fue destinado al programa de “Impulso a la Competitividad del Campo”, para apoyar a unos 30 mil campesinos con los cultivos de maíz, hortalizas, chile y frijol, pero los apoyos nunca llegaron a manos de los campesinos.
Por si fuera poco, la dependencia no abrió una cuenta bancaria específica para depositar los fondos, sino que fueron enviados a una que controlaba el subsecretario de Agricultura, Germán Parra, y luego dispersados por medio de cheques a trabajadores.
“Los recursos fueron a dar a la cuenta del subsecretario de Agricultura, Germán Parra, no estrictamente a una cuenta personal; todo lo sacaron a través de cheques y gastos a comprobar y, hasta donde se tiene evidencia, los hallazgos respectivos comprueban que, efectivamente, todo fue falsificado. Se falsificó toda la documentación para hacer el soporte”, dijo una fuente anónima a Expansión.
Según el informe, la acreditación de la entrega de los recursos a sus legítimos destinatarios implicó la creación de una lista de raya con nombres y números de credenciales de elector que supuestamente fueron firmadas por los campesinos beneficiarios.
De acuerdo con el información entregada a Expansión, mientras que la mayoría de los apoyos oscilaba entre 9,000 y 25,000 pesos, se detectaron otros que otros alcanzaban 300,000 pesos.
Para corroborar la información, la Auditoría Superior del Estado escogió una muestra aleatoria y buscó a los campesinos. La sospecha se confirmó: los labriegos desconocían el programa de apoyo y negaron haber firmado los documentos que avalaron la entrega de recursos.
Se cree que las listas firmadas, fueron fabricadas a partir de los datos del padrón electoral.
Según la investigación periodística, “además de los despojos a empresas y particulares mediante juicios laborales a modo, el exgobernador de Quintana Roo, Roberto Borge, conformó una red de más de 50 personas que día a día saquearon las arcas de esta entidad del Caribe Mexicano. La máquina puntualmente aceitada funcionó hasta que perdió el poder hace un año”.
Vía Expansión