Deshielo del ártico podría hundir islas y zonas costeras: NASA

Ártico, sitio donde investigadores estudian el cambio climático. “El nivel de los océanos podría aumentar siete metros”, afirman


Regeneración, 30 de agosto del 2019. El deshielo de zonas como Groelandia podría dejar bajo el agua islas completas advierte un grupo de científicos de la NASA.

Los investigadores se encuentran sondeando las aguas del Ártico para medir el impacto que pueden tener de los océanos en el derretimiento.

Joshua Willis dirige la misión Oceans Melting Greenland (‘Derretimiento de los océanos Groenlandia’), que desde 2015 supervisa este territorio autónomo danés víctima del cambio climático.

Amenaza para millones 

«El nivel del mar podría aumentar probablemente en varios metros en los próximos 100 años, es una amenaza enorme para cientos de millones de personas en el mundo», alerta Willis.

El análisis se realiza lanzando al vacío sondas de metro y medio de diámetro, llenas de sensores.

Una vez sumergidas, la sondas envían en tiempo real información sobre la temperatura y la salinidad del océano.

Estos datos se traducen en diagramas multicolores en las pantallas del laboratorio volador de los científicos.

«Mucha gente cree que el hielo se derrite debido al calentamiento del aire, como si fuera un cubito bajo un secador de cabello, pero en realidad los océanos también corroen el hielo», menciona el investigador.

Groenlandia, una isla de dos millones de kilómetros cuadrados rodeada en tres cuartas partes por las aguas del océano Ártico, está cubierta de hielo en un 85%.

Este inmenso territorio se encuentra en la línea de frente del deshielo del Ártico, una región cuya temperatura aumenta el doble de rápido que en el resto del planeta.

Si la banquisa y el hielo que cubren la base continental desaparecieran, el nivel de los océanos podría aumentar siete metros y sumergir islas y regiones costeras por todo el planeta.

«La lejanía de Groenlandia es un desafío singular», reconoce por su parte Ian McCubbin, otro de los científicos de OMG.

McCubbin está encargado de la logística para estas misiones que parten del pequeño aeropuerto de Qulusuk, una comunidad de menos de 300 habitantes.

«Esos datos son preciosos porque, por primera vez, nos permiten vincular cuantitativamente los cambios de temperatura del océano con el deshielo», explica McCubbin.

Nueva ruta

Este deshielo abre al tráfico marítimo las grandes vías del Norte, que permiten unir el océano Pacífico con el Atlántico.

Este hecho aviva el apetito económico y geoestratégico de las grandes potencias, con Estados Unidos, China y Rusia a la cabeza.

Tanto es así que el presidente estadounidense, Donald Trump, propuso a Dinamarca comprarle Groenlandia, una oferta rechazada que provocó una minicrisis diplomática con su aliado en la OTAN.