Detrás de la decisión de liquidar Luz y Fuerza del Centro están las intenciones de privatizar la industria eléctrica. Por eso antes se le dio el manejo de mil kilómetros de fibra óptica de LyFC a la empresa WL Comunicaciones, representada por Diego Fernández de Cevallos y cuyos dueños son los también panistas Fernando Canales Clariond y Ernesto Martens, ex secretarios de Energía con Fox.
La fibra óptica es un gran negocio, es el mercado del futuro, porque permite en un solo canal dar servicios de voz, datos e imagen; es decir, teléfono, internet y televisión. El 30 de junio de 2009, el SME y el director de Luz y Fuerza del Centro, Jorge Gutiérrez Vera, solicitaron a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes una concesión para operar la red de fibra óptica y ofrecer estos servicios. Pero la SCT se la dio a WL Comunicaciones, asociada con la española Telefónica, dirigida por Francisco Gil Díaz, ex secretario de Hacienda, y Cablevisión, de Televisa. Se trata de un mercado valuado en 6 mil millones de dólares.