Activistas y defensoras de Derechos Humanos iniciaron una “alerta ciudadana” para visibilizar los lugares donde desaparecen y son arrojados los cuerpos sin vida de las mexiquenses
Sólo de 2011 a 2012 fueron desaparecidas 600 mujeres; la mayoría jóvenes menores de 17 años
Regeneración, 26 de julio 2014.-Dos meses atrás, ante la inacción y dilación de las autoridades del Estado de México para frenar el feminicidio y declarar la Alerta de Violencia de Género (AVG), activistas y defensoras de Derechos Humanos (DH) iniciaron una “alerta ciudadana” para visibilizar los lugares donde desaparecen y son arrojados los cuerpos sin vida de las mexiquenses.
Como parte de esa campaña, integrantes del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), activistas y familiares de víctimas recorrieron hoy Nezahualcóyotl y Chimalhuacán, dos de los 10 municipios del Edomex que concentran el 50 por ciento de los más de mil 200 asesinatos de mujeres registrados entre 2005 y 2013.
María de la luz Estrada, coordinadora del OCNF, explicó que las autoridades de ambas localidades tienen en común que consideran a las mujeres como “objetos o basura”.
Lo anterior porque en la mayoría de los casos los cuerpos son arrojados en terrenos baldíos, casas abandonadas, basureros o avenidas sin iluminación o en pésimas condiciones, como el Río de la Compañía y el Bordo de Xochiaca, avenida que además de albergar un tiradero de basura y casas de cartón, marca el límite entre ambos municipios.
“Trabajadoras, profesionistas, estudiantes y amas de casa un día salieron de su casa y no volvieron, o volvieron en un ataúd ante las miradas omisas de las autoridades mexiquenses”, expuso Estrada.
Por ello pidió al alcalde de Nezahualcóyotl, Juan Manuel Zepeda, así como a su par de Chimalhuacán, Telésforo García Carreón, informen de manera precisa el número de desapariciones de jóvenes y niñas en esos municipios, pues muchas de ellas desaparecen en una localidad y luego son halladas sin vida en otra.
Como primer punto, las y los activistas se reunieron en la explanada municipal de Nezahualcóyotl donde colocaron una cruz rosa, y Leticia Barrera, integrante de la organización mexiquense Faz, expuso que de 2010 a 2014 en ese municipio se tiene un registro de 34 mujeres asesinadas, de quienes se desconoce si ya tuvieron justicia.
A esto se suma que sólo de 2011 a 2012 fueron desaparecidas 600 mujeres; la mayoría jóvenes menores de 17 años.
RECORRIDO
Durante la mañana, Viviana Muciño Márquez, hermana de Nadia Muciño Márquez, joven asesinada por su esposo en febrero de 2004, expuso la manera en que las autoridades mexiquenses no atienden las denuncias de violencia contra las mujeres.
Con la activación de la AVG lo único que le pedimos al gobierno federal es que respete “el derecho a la vida que todas y todos tenemos”, dijeron.
Posteriormente, las manifestantes se trasladaron al palacio municipal de Chimalhuacán, donde con consignas, pancartas y la participación de bicitaxistas y transportistas realizaron una manifestación en las calles aledañas.
Frente al palacio municipal, que fue cerrado y protegido por la policía local, expresaron su indignación ante la impunidad de los casos de feminicidio, desaparición y violencia sexual, delitos que en el municipio incluso son cometidos por policías.
En Chimalhuacán, por ejemplo, Mariana Lima Buendía fue asesinada en 2010 por un agente que tras declarar que su esposa se había suicidado fue elevado de rango. Ahí también fue ultimada la niña de siete años Angélica Abigaíl Pizano.
En la protesta, tomó la palabra Alejandra Flores Flores, joven que fue violada sexualmente en febrero de 2013 por los policías Pedro Luis Becerril Ríos, Andrés Alan Hernández y Francisco Arechiga, quienes también asesinaron a su novio.
Alejandra contó a esta agencia que aunque los policías están detenidos y hay pruebas de que ellos fueron los responsables, el juzgado argumenta no tener las pruebas suficientes para sentenciar a los agresores.
Al finalizar el acto, las y los manifestantes, así como habitantes del municipio, colocaron cruces rosas en las puertas del palacio municipal donde hubo un conato de enfrentamiento, ya que los policías que resguardan el lugar intentaron detener la protesta.
Posteriormente las activistas caminaron a las oficinas locales de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), donde se ubica el Centro de Atención Ciudadana Chimalhuacán.
Ahí, Irinea Buendía, madre de Mariana Lima Buendía, acusó que en esas instalaciones peritos forenses, investigadores y demás personal alteraron, perdieron y modificaron las pruebas del asesinato de su hija.
Sostuvo que además los agentes del Ministerio Público le pidieron dinero para investigar los hechos: “Los policías en lugar de cuidar de nuestras hijas, las violan, las asesinan y luego dicen que a ellos nadie les hace nada porque tiene el poder, pero yo les digo que aquí estamos para decir ya basta”.
La campaña de las activistas, además de exigir la declaratoria de AVG en la entidad, busca recopilar los casos y testimonios de familiares. Tan sólo durante el recorrido por el municipio de Ecatepec, el pasado 25 de junio, el OCNF encontró 17 casos de jóvenes desaparecidas.
Integrantes del OCNF dijeron que está firme su exigencia de sostener una reunión con el gobernador de la entidad, Eruviel Ávila Villegas, para exigir justicia y que ponga fin a la ola feminicida. Adelantaron que el próximo recorrido será por el municipio de Chalco.
Información: Cimacnoticias