Mediante pruebas de laboratorio la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas confirmó que se utilizó gas mostaza en un ataque que afectó a alrededor de 35 soldados.
Regeneración 15 de febrero del 2016.- La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) confirmaron que se utilizó gas mostaza en los dos ataques perpetrados cerca de Erbil, la capital de Kurdistán iraquí, en agosto de 2015.
Esto debido a los resultados de una serie de exámenes realizados a 35 soldados que enfermaron en el campo de batalla.
Es la primera vez que se determina el uso de armas químicas en Irak desde la caída de Saddam Hussein, y aunque no se ha comprobado a quien utilizó el agente químico, se sabe que fueron combatientes del Estado Islámico.
El gas mostaza es un componente químico que al contacto con la piel produce ampollas, no sólo en la piel, también si es inhalado produce heridas internas en la mucosa de la tráquea, los bronquios y los pulmones; lesiones sangrantes que derivan en hemorragias.
Los expertos creen que el químico fue obtenido de una reserva no declarada o que los militantes adquirieron el conocimiento para desarrollarlo y realizar un ataque con cohetes y morteros.
Las autoridades kurdas ya habían denunciado que durante los ataques de agosto del 2015 contra las ciudades de Gweyr y Makhmur, hechas con morteros, “se dispersaron un polvo blanco y un líquido negro tras explotar”.
“Los resultados de los exámenes de sangre revelaron trazas de gas mostaza”, dijo entonces el ministro kurdo.
La revelación del ataque se conoce apenas unos días después de que Estados Unidos aseguraran que los yihadistas tienen la capacidad de utilizar pequeñas cantidades de gas mostaza y cloro para ser utilizado en los combates tanto en Siria como en Irak.
Fuentes: Terra