Desde antes del temblor, la escasez de agua ya presionaba en los hogares de las demarcaciones, pero luego del 19 de septiembre, es casi nula, algunos vecinos lo califican como inhumano.
Regeneración, 01 de octubre de 2017.– Desesperados están las personas del oriente de la Ciudad de México quienes buscan abastecerse a cualquier precio de agua.
Y es que desde hace 23 días personas del lugar se forman por horas en las oficinas del Sistema de Aguas de la Ciudad de México para solicitar una pipa y que sus vecinos puedan llenar un tambo para las necesidades.
Las delegaciones afectadas son Iztapalapa, Tláhuac y Xochimilco demandan la falta de agua, incluso antes del sismo del 19 de septiembre; según vecinos el desabasto radica, según explican, en que no se le ha dado mantenimiento a la infraestructura hidráulica, la cual, tras el sismo del pasado 7 de septiembre, empezó a fallar y provocó la falta de agua… después, con el sismo del 19 de septiembre, la situación empeoró.
“Hoy llegamos desde las cinco de la mañana, después de siete horas nos van a dar la pipa, pero hemos tenido que venir varios días y sólo nos llenan un tambo por familia. Estamos cansados de esta situación”, dijo una habitante de la colonia Tepalcates, en Iztapalapa, quien se ha formado en la oficina regional Oriente del Sistema de Aguas de la Ciudad de México por dos semanas.
“No tenemos agua, necesitamos para bañarnos y para el baño, no voy a arriesgar a mis hijas a que se
enfermen, mejor me arriesgo un poco”, comentó José, vecino de la colonia Presidentes.
Algunas personas no han podido sumarse a las filas para pedir una pipa, pero por la cercanía o por
contar con medios de transporte han podido ir con cubetas, tambos e incluso tinacos para llenarlos.
“Tuvimos que comprar un tinaco de mil 300 pesos, porque no tenemos el tiempo para venir a formarnos tantas horas, además que sólo te rellenan un tambo, es inhumano lo que estamos pasando,
deben solucionar el problema”, comentó un vecino de la colonia Santa María Aztahuacan.
La gente se dice molesta por el oportunismo del gobierno, aseguran que, pese a no tener abasto, los
recibos llegan y condicionan el pago por agua.
Vía El Universal y Huffpost