La necropsia del menor reveló que la causa de muerte fue un paro cardiorrespiratorio por ingesta de veneno.
Regeneración, 28 de noviembre de 2017.- En el ejido Parras, Coahuila, un menor de un año y cinco meses murió luego de ingerir veneno, que se encontraba guardado en una botella de yogurt en la casa de sus abuelos.
El abuelo del menor también ingirió el líquido, pues al ver que el pequeño lo consumía, lo probó para ver de qué se trataba. Ahora, se encuentra grave en el hospital.
La abuela del niño, Alicia Huerta Suárez, comentó que ella se encontraba lejos cuando alcanzó a ver que el menor hacía señas, se acercó a ver que le ocurría y se percató de que el abuelo también tenía síntomas de dolor.
De acuerdo con medios locales, la Agencia de Investigación Criminal de la Fiscalía General del Estado tomó conocimiento del deceso del menor y ya realizan las investigaciones correspondientes.
Fernanda de la Rosa Sánchez, madre del menor, había dejado al pequeño Ángel Abdiel al cuidado de sus abuelos, por lo que fue avisada de la situación mientras el menor y el abuelo fueron trasladados al centro médico de Parras, pero al llegar ahí, el niño ya no contaba con signos vitales.
El adulto mayor continuaba sintiéndose mal por lo que fue trasladado de urgencia a un nosocomio en Torreón.
La necropsia del menor reveló que la causa de muerte fue un paro cardiorrespiratorio por ingesta de veneno. Algunos medios indicaron que el contenido de la botella era Furadan, uno de los pesticidas más tóxicos.
Con información de Posta y SDP