Construir un muro en la frontera México-Estados Unidos enfrenta obstáculos económicos, geográficos y legales que el Gobierno de Trump no suele mencionar
Regeneración, 26 de marzo de 2017.- Hablar de un muro a lo largo de la frontera México-Estados Unidos es sencillo, sin embargo, a la hora de concretar un proyecto de esa magnitud se presentan una cantidad considerable de obstáculos económicos, geográficos y legales que la Administración del presidente Donald Trump no suele mencionar.
Obstáculos económicos
Donald Trump ha asegurado en varias ocasiones que México pagará por su famoso muro fronterizo, cosa que el Gobierno mexicano ha negado siempre.
Incluso los republicanos descartan que México vaya a pagar directa o indirectamente por el muro; el propio líder del Partido Republicano en el Senado de Estados Unidos, Mitch McConnell, informó que no cree que México vaya a pagar por el famoso muro fronterizo e incluso se supo que Donald Trump piensa pedir un préstamo al Congreso de seis mil 600 millones de dólares para iniciar el proyecto. Se estima que la barda tendrá un costo de 21 mil 600 millones de dólares.
Ver: ‘¿México pagará por el muro? No’: Líder republicano en Senado de EU
Ver: Estiman que muro de Trump costaría 21 mil 600 millones de dólares
Además no está claro cuánto dinero vaya a aprobar el Congreso para el proyecto.
Obstáculos geográficos
Las condiciones del terreno también dificultarán la construcción de la magna barda. Para empezar, desde 1970 existe un acuerdo entre México y Estados Unidos que obliga a que cualquier cosa que se construya cerca del río no obstruya su flujo. Dicho tratado aplica a un tramo de la frontera en Arizona, donde el río Colorado delimita la frontera internacional.
Además, los cercos que ya hay en la frontera están ubicados a una buena distancia del río, en algunos lugares a casi un kilómetro de la frontera.
Trump tendrá que sobrellevar no solo el tratado, mantenido por la Comisión Internacional sobre Fronteras y Agua, sino también varias regulaciones ambientales que protegen algunos tramos de la frontera y restringen ciertos tipos y zonas de construcción.
Obstáculos legales
Casi todos los terrenos en la frontera con Texas son propiedad privada perteneciente a personas cuyas familias han vivido ahí por generaciones.
Comprar esas tierras no será fácil. Los expresidentes George W. Bush y Barack Obama se dieron cuenta de esto cuando litigaron contra los propietarios de las tierras.
La Administración de Trump parece estarse preparando para peleas legales y agregó un presupuesto para pagar a un equipo de abogados.
el vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer dijo que la Administración tomaría «los pasos necesarios» para cumplir la promesa de Trump de asegurar la frontera con México.
Con información de AP