Desde que fue operada de la vesicula, la menor no ha podido acudir a sus citas médicas por estar recluida en el centro de detención para menores.
Regeneración, 3 de noviembre de 2017.- Este viernes, la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) denunció que Rosa María Hernández, la niña indocumentada de diez años con parálisis cerebral detenida en Texas hace más de una semana, no ha podido acudir a sus citas médicas por estar recluida en el centro de detención de menores.
Rosa María fue detenida el pasado 25 de octubre por la Patrulla Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés) cuando fue dada de alta de un hospital de Corpus Christi donde fue atendida de emergencia por una cirugía de la vesícula.
Después de la operación, la CBP detuvo a la niña “sin tener una orden judicial” y la llevó a un centro de detención de menores en San Antonio (Texas), un lugar donde no puede recibir la asistencia médica necesaria, según la organización civil.
“Se suponía que Rosa María tenía que ver a su médico el sábado pasado, pero como está detenida no pudo ir”, dijo en entrevista con Efe el abogado principal de ACLU, Edgar Saldívar.
Asimismo, explicó que la menor no podrá ir este viernes a su cita de seguimiento postoperatorio con el cirujano que la operó, pues para eso se necesitaría “su liberación inmediata”.
Saldívar informó que este caso no es el único que han atendido pues en ACLU se reciben numerosas denuncias de personas indocumentadas en situaciones parecidas.
Esta semana, ACLU demandó al gobierno de Donald Trump, por haber arrestado a la menor en un hospital, un lugar considerado “sensible” bajo la propia política del Departamento de Seguridad Nacional.
La menor llegó a EU a los tres meses de edad, cuando cruzó con sus padres desde la frontera por Nuevo Laredo, Tamaulipas.
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