Las trabajadoras estarían negándose a recargar los nuevos plásticos argumentando que el lector no las identifica.
Regeneración, 12 de noviembre de 2017.- Las nuevas tarjetas del metro, que trabajan como una de débito, podrían estar poniendo en jaque a las taquilleras del metro y sus trabajos.
La tarjeta, que puede ser utilizada como una forma de pago en el transporte público, también es útil para hacer pagos, transferencias y compras en más de 28 mil establecimientos; pero no sólo eso, debido a su naturaleza, la tarjeta puede ser recargada en diversos establecimientos, lo que podría ser una amenaza para las taquilleras.
Según reportes de usuarios, algunas de estas trabajadoras se están negando a realizar recargas de las nuevas tarjetas argumentando la imposibilidad de hacerlo a través de sus computadoras, por lo que los demás usuarios deben comprar boletos.
Al parecer el lector que se usan en las instalaciones del Metro, no idendifican la tarjeta que cuenta con dos chips, uno de para el sistema de transporte y otros para ser usado en cajeros automáticos y puntos de venta.
«La idea es que se pueda tener un subsidio de la iniciativa privada hacia la tarjeta para que no le cueste al Metro más ni al ciudadano o usuario más», declaró el director del Metro, Jorge Gaviño, tras la presentación de la tarjeta.
La nueva tarjeta fue creada por la empresa Broxel, la cual afirma tiene múltiples beneficios, con la que podrás pagar, comprar y viajar. En la primera fase de lanzamiento se venderán 50 mil tarjetas, con un costo de 10 pesos cada una y podrán utilizarse en todas las líneas del metro.
Vía El Universal.