En una misiva que circula en redes sociales, soldados de tropa piden volver a cuarteles y aseguran que las violaciones a DDHH son para “combatir el mal”. Si no les gusta “hagan la chamba ustedes”, dicen.
Regeneración, 18 de mayo de 2017.- Mediante una carta en la que manifiestan su deseo por volver a los cuarteles, soldados de tropa destacamentados en Tamaulipas aseguran estar “hartos de luchar contra sicarios” que después salen libres porque “las autoridades no hacen su trabajo”.
El texto que circula en redes sociales subraya “estamos cansados de ver como emboscan a nuestros compañeros de forma cobarde y que ninguna autoridad, Organización No Gubernamental y de Derechos Humanos ‘hagan algo’”.
Los soldados aseguran que les duele perder a compañeros en esta guerra “y aunque eso no debe ser motivo de venganza, siempre nos dejará a nosotros ese dolor, ese dolor de ver hermanos caer y que nadie haga algo; porque somos nosotros los que salimos a partirnos la madre con los sicarios”.
Asimismo, aseguran que las policías están coludidas con el crimen organizado y por ello han sido los militares quienes luchan para salvaguardar a la población.
“Somos nosotros los que luchamos, no tú defensor de derechos humanos, no tú miembro de alguna ONG que nos acusa de lo peor, no tú que te quejas de nuestro trabajo en la comodidad del hogar”.
Incluso, los soldados afirman que han “levantado” a varios de sus compañeros y los han torturado hasta la muerte.
“Han matado a las familias de nuestros compañeros como represalia ¿Creen que eso no nos duele?”, cuestionan.
El texto también versa sobre las violaciones a derechos humanos por parte de militares y sostiene que es un tema que no puede ocultarse, pero si la sociedad no está de acuerdo entonces deberían “hacer la chamba”.
“Sin embargo, no es para justificar el actuar de nuestros hermanos de armas, solo diré lo siguiente y queda a criterio de la sociedad: Queremos que el país sea mejor, y si para lograrlo hay que morir o quedar mal de por vida, con gusto aceptamos el precio, pero no echen nuestro sacrificio al carajo (…) Hemos tomado medidas drásticas para combatir al mal, pero si tanto les hiere que violemos los derechos humanos del sicario ‘inocente’, entonces hagan la chamba ustedes”.
Y continúa; “regresemos a los cuarteles, para que tengan la confianza de que nadie le tocará un pelo al sicario; si mucho aman a sus criminales, quédense con ellos y no vengan de rodillas a pedir que se haga algo”.
Los soldados destacamentados en Tamaulipas alegaron también que nunca “han dicho que no” ni “dado un paso atrás”, aun cuando la “operación fue difícil”.
Con información de Proceso