- Eliminar privilegios fiscales y reducir salarios de la alta burocracia, para superar la crisis, urge López Obrador.
- Suspender la venta de petróleo al extranjero y construir refinerías para dejar de importar gasolinas.
- Reactivar el campo y apoyar a los productores, recomienda
Son decisiones que ya las debería de estar tomando Felipe Calderón, diciéndole a la gente que ante la crisis, ante el empobrecimiento del pueblo, ante la falta del trabajo, ante la falta del crecimiento económico, ante la inseguridad y la violencia, es indispensable tomar una decisión de ahorrar el 10 por ciento del presupuesto para darle viabilidad a la Nación, para crear un ambiente de progreso, de justicia y enfrentar así el flagelo de la delincuencia”, recomendó.
Ante los coordinadores de los comités municipales, distritales el presidente legítimo de México mencionó algunas de las medidas: “no vender ni un solo barril de petróleo crudo al extranjero, todo lo vamos a procesar en México, en nuestro país”.
Destacó que la citada iniciativa generará reacciones entre los potentados, “porque no les conviene a los que tienen el negocio de la compra de la gasolina que se construyan la refinería en el país”.
"¿No es raro que desde hace 28 años no se construye una nueva refinería en México?, ¿por qué? Porque se están comprando el 40 por ciento y cada vez más de la gasolina que consumimos, es decir, se compran 300 mil barriles diarios de gasolinas, lo que significa un gasto de 12 mil millones de dólares al año”, explicó.
Sostuvo que no se sabe cuánto cuesta la importación de gasolinas, ni quién la compra a empresas extranjeras, porque es negocio de unos cuantos y “por eso necesitamos cambiar ya la política petrolera, tenemos que construir las refinerías, parar lo que aprobó la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre los contratos incentivamos, para que empresas extranjeras exploten el petróleo y se queden con una parte de la producción petrolera del país”.
Adelantó que el movimiento que encabeza “dará marcha atrás a todas esas reformas que son antinacionales, todas esas reformas que se han venido imponiendo por convenir a la mafia del poder y del dinero”.
Otra decisión, puntualizó, está relacionada con el ahorro de 10 por ciento del presupuesto nacional, que será de 3 billones 500 mil millones de pesos para el próximo año, es decir, no se gastarían 350 mil millones de pesos y con dichos recursos se puede impulsar la actividad productiva, se puede rescatar el campo, generar empleos y atender a los jóvenes.
Una más, detalló: se requerirá bajar sueldos los altos funcionarios públicos, que no haya atención médica privada ni cajas de ahorro, tampoco utilizar aviones y helicópteros, para obtener ahorros y liberar fondos para el desarrollo del país.
Además, prosiguió, deberán pagar impuestos los 400 grandes consorcios económicos y financieros que son los que tienen más ingresos en el país y que no pagan impuestos, y además utilizan dinero público para su beneficio.
Un ejemplo claro, expresó, que de los fondos de ahorro del Instituto Mexicano del Seguro Social se destinaron recursos para apoyar comprando acciones de la Bolsa Mexicana de Valores a Telmex, y a Cemex, empresas que no pagan impuestos y “se les apoyó en este sexenio con 13 mil millones de pesos”.
Expuso que si se acaban con los privilegios fiscales se obtendrían alrededor de 300 mil millones de pesos adicionales, sin cometer arbitrariedades, sin cobrar impuestos excesivos, solo que paguen lo que corresponde.
“Muchos de los cambios que vamos a llevar a la práctica van orientados a que se cumpla con la Constitución que está convertida en letra muerta, y además para obtener recursos para el desarrollo, para cumplir con nuestros compromisos de que haya un estado de bienestar en el país”, expuso.
Asimismo, detalló, producir en México lo que consumimos, no como ahora que con la política de pillaje que se impuso, desde hace más de 27 años, tenemos que comprar los alimentos en el extranjero como el maíz, el fríjol, la carne de res.
Llamó a los integrantes de los comités a “olvidarse de la politiquería, de que ya nos traicionaron, eso denlo por sabido, muchos traicionan, se quedan a la orilla del camino, pero levantemos la mira, pensemos que tenemos un gran objetivo, hagamos a un lado la política ratonera, pensemos en el país, pensemos en el pueblo.
Al conceder una entrevista a los reporteros, expresó sentirse seguro de que hay una gran parte de la ciudadanía que quiere la transformación del país y por ello, el movimiento que encabeza se está organizando para volver a participar en las elecciones del 2012 y volverle a ganar a la mafia del poder y del dinero.
Al pedirle su opinión sobre si está bien posicionado para volver a contender en unos comicios presidenciales, López Obrador señaló: “pues yo estoy muy bien”.
Tras preguntar los reporteros al presidente legítimo de México que si será difícil ganar la contienda presidencial de 2012 ante una posible alianza entre el PAN y el PRD y por el otro lado el gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto es el candidato del PRI, respondió que la mafia del poder, integrada por Carlos Salinas, Elba Esther Gordillo, Vicente Fox, está impulsando a Peña Nieto, pero la gente quiere un verdadero cambio.
Detalló que el jefe de la mafia es Salinas de Gortari y es el encargado de promover al gobernador mexiquense para que sea el candidato del PRI al 2012, y Televisa está a cargo de su publicidad, es todo un fenómeno mediático.
Comentó que ya está demostrado que ni el PRI ni el PAN son opciones o alternativas para sacar adelante al pueblo y sacar adelante a país.
Un ejemplo claro, puntualizó, es lo que se padece en Veracruz, porque han gobernado tanto priistas como panistas y la entidad no ha salido adelante. “Es lo mismo Fidel Herrera que Elba Esther Gordillo; es lo mismo Peña Nieto que Calderón; es lo mismo Manlio Fabio Beltrones que Vicente Fox”, subrayó.
Explicó que en las cúpulas del tricolor y del albiazul no tienen diferencias, aunque la única diferencia posible es que los priistas son ladrones y los panistas son rateros.
El presidente legítimo de México explicó que con la gente se podrá luchar contra el recurso económico que tiene la mafia, “porque los caciques duran hasta que el pueblo quiere, todo depende del pueblo, del despertar ciudadano”.
Ante el mandato del nuevo gobernador de Veracruz, Javier Duarte Ochoa, indicó que es más de lo mismo, o sea, más corrupción, pobreza para el pueblo, incremento en la marginación, inseguridad, violencia, es más de lo mismo.
“Terminó la gestión de Fidel Herrera y al pueblo más avispado se lo chorearon, porque el nuevo gobierno será igual o peor que el anterior y no estemos pensando que las cosas van a cambiar de arriba para abajo”, afirmó.