La transición ‘atípica’ de AMLO fue sólo una muestra del ritmo de gobierno que busca el presidente electo, considera Salvador García Soto.
Regeneración, 27 de noviembre de 2018.- El arranque de la administración de Andrés Manuel López Obrador, será a paso acelerado.
Su agenda diaria pasará entre reuniones con el gabinete de seguridad, conferencias de prensa, asistencia a eventos, trabajo en el despacho y giras por todo el país.
Si el periodo de transición se sintió acelerado, en los primeros días de la gestión lopezobradorista, se verá el verdadero ritmo, adelantó en su columna el periodista Salvador García Soto.
“Si en estos cuatro meses de transición atípica, la agenda y el ritmo del presidente electo se han percibido acelerados, el arranque de Andrés Manuel López Obrador como presidente constitucional será todavía más movido”, indicó en su columna Serpientes y Escaleras.
“Según los horarios que López Obrador ha definido ya para el inicio de su administración, la agenda diaria del presidente comenzará a las 6 de la mañana con una reunión con el gabinete de seguridad en Palacio Nacional para supervisar la situación del país”.
Luego de la reunión de seguridad, López Obrador tendrá conferencia de prensa para hablar sobre los temas de su agenda política, de gobierno y responderá preguntas de los reporteros.
Mas tarde, sostendrá reuniones en su despacho o asistirá a eventos o reuniones programadas.
Este ritmo se sostendrá de lunes a jueves, y los viernes, sábados y domingos, la agenda será de visitas y giras a las distintas entidades del país.
”Buscará visitar no sólo las capitales estatales, sino también municipios importantes, lo mismo para supervisar el avance de obras en proceso, como para vigilar el adecuado funcionamiento de sus programas sociales y de apoyo a la población más vulnerable”, indica el columnista.
El presidente electo, desde su triunfo ha marcado la agenda pública, pero una vez que asuma, sus opiniones se potenciarán.
“Seguirá siendo, a decir de sus colaboradores, un presidente mediático, cercano a la gente con la que seguirá teniendo contacto directo en sus giras y eventos, y que lo mismo dicte la agenda política y de opinión pública del día, responda a críticas sobre su gobierno y su ejercicio público, que recorra cada rincón del país al mismo ritmo frenético que mantiene desde su campaña de 2006”, escribió.