Roberto Gil del PAN afirma que el presidente no tiene las facultades para abrogar al Reforma Educativa y que el memorandum tiene problemas constitucionales
Regeneración, 16 de abril 2019. Tras la firma del memorandum para abrogar Reforma Educativa hecha por el presidente López Obrador, diversos personajes de la política del país han comentado que las reformas constitucionales no se pueden hacer por decreto presidencial.
Políticos como Roberto Gil Zuarth del PAN han señalado que existen “problemas constitucionales del memorándum educativo”, y añade que no es válido, pues el presidente no tiene las facultades legales para hacerlo.
Además, Gil Zuarth lanza una crítica al señalar que se rompió el orden constitucional con este memorándum.
Problemas constitucionales del memorándum educativo: no es válido, por haberse emitido sin facultades y fuera de los procedimientos de creación normativa; si el Estado lo aplica con eficacia, estamos frente a la ruptura del orden constitucional. Así el entuerto.
— Roberto Gil Zuarth (@rgilzuarth) 16 de abril de 2019
De igual modo, mediante un tuit, Felipe Calderón le recordó al presidente Andrés Manuel López Obrador que “la Constitución y la ley sólo puede modificarse o abrogarse en alguna de sus partes mediante el procedimiento que las propias Constitución y Ley establecen. El Presidente de la República está obligado a “Cumplir y hacer cumplir la Constitución” no puede derogarla por decreto.
La Constitución y la ley sólo puede modificarse o abrogarse en alguna de sus partes mediante el procedimiento que las propias Constitución y Ley establecen. El Presidente de la República está obligado a “Cumplir y hacer cumplir la Constitución” no puede derogarla por decreto.
— Felipe Calderón (@FelipeCalderon) 16 de abril de 2019
En días pasados, otros políticos como René Juárez Cisneros, líder de la fracción del PRI en San Lázaro, advirtió que el Ejecutivo carece de facultades para abrogar o derogar la reforma de 2013.
El priista citó los artículos 9, 72 y 89 de la Constitución Política para fundamentar su afirmación y recordó que los presidentes que expedido leyes necesitaron la autorización del Congreso.
Sin embargo, esto ya no es posible, pues en 1938 se canceló esta posibilidad.