Luego de muchos años de investigación terminé el libro El poder en el trópico. Más de 800 páginas, publicado por la editorial Planeta. Lo presentarán el lunes próximo, a las 6 de la tarde, en el Teatro Esperanza Iris de Villahermosa, Carlos Pellicer López y Carlos Ruiz Abreu. Me acompañará también Jaime Avilés. A mis amigos del «feis» les comparto la introducción:
Regeneración, 13 de mayo del 2015. En su página de facebook, AMLO señala, en primera persona, que esta obra, escrita a lo largo de varios años, es, en términos generales, un compendio de cuatro libros sobre la historia y la política en mi estado natal. Hace 29 años la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, la UJAT, me publicó la investigación que incluyo ahora como Parte 1 con el mismo nombre: Los Primeros Pasos (1810-1867). El segundo libro, llamado Del esplendor a la sombra (La República restaurada, 18671876) y editado en 1988 por la misma universidad, es ahora la Parte 2. Pasaron muchos años para terminar el trabajo sobre el Porfiriato y la Revolución, que presento como la Parte 3. Por último, los diez relatos de actualidad que conforman la Parte 4, son reflexiones de ayer y hoy, escritas como epílogo de lo acontecido en nuestro tiempo.
A pesar de que revisé de nuevo los antiguos textos, principalmente para uniformar el estilo, decidí dejar los prólogos que en su momento elaboraron para Los Primeros Pasos y para Del esplendor a la sombra, dos grandes periodistas y escritores ya fallecidos, Rodolfo F. Peña y Pedro Ocampo Ramírez. Asimismo, con toda la admiración y respeto que le profeso, le pedí a Elenita Poniatowska el texto que leyó cuando presentó mi libro Neoporfirismo, Hoy como Ayer, para introducir El Porfiriato y la Revolución en Tabasco. Por último, Jaime Avilés, con la generosidad y lucidez que lo caracterizan, escribió el prólogo sobre los Diez relatos de actualidad.
El método que siempre utilicé consistió en analizar lo sucedido en Tabasco, teniendo como referencia lo registrado a escala nacional y destacando las características propias de la región, así como sus circunstancias políticas y sociales específicas. Espero que la obra completa no resulte tediosa porque, sin ser rigurosamente académica, no es tan ligera, tiene profundidad y, sobre todo, abundancia de pruebas documentales que considero indispensables para demostrar lo que sostengo.
La enseñanza mayor de esta historia es que las dos grandes demandas del pueblo: la justicia y la democracia, siguen siendo un hermoso ideal. Un ideal por el que se han sacrificado y lo seguirán haciendo, seres humanos sencillos o excepcionales que nunca se someterán a tiranos, ni aceptarán la teoría conservadora, según la cual, “mientras haya mundo, tendremos un número muy reducido de afortunados, en contraposición con la inmensa mayoría, que lucharán en vano por alcanzar los favores de la fortuna”. En otras palabras, siempre existirán los señalados cómo idealistas, locos, soñadores, mesiánicos o simplemente humanistas que buscarán el triunfo de la justicia sobre la codicia y el poder.
Agradezco mucho a investigadores e historiadores por sus aportes a este trabajo. Ellos son, en lo colectivo, los verdaderos autores; mi contribución se limita a interpretar los hechos con la experiencia que me permite el oficio de dirigente social y político. Mi agradecimiento también a Rodrigo Borja, Laura González Nieto, César Yáñez Centeno, Gilda Moreno Manzur y Carlos Ruiz Abreu, que me ayudaron en la revisión y corrección de datos y del contenido. De igual manera, agradezco a la UJAT por coeditar con Planeta esta obra que va dedicada, en especial, a los jóvenes de mi tierra y de mi agua.