El peso mexicano, que se ha depreciado casi un 12 por ciento en lo que va de 2015, tocó un piso histórico de 16.85 por dólar
Regeneración, 19 de agosto del 2015.-Agustín Carstens, dijo que el Banco de México (Banxico) hará todo lo posible para evitar que la depreciación del peso afecte a la inflación, que está en niveles históricamente bajos.
El funcionario dijo que el Banco de México debe estar vigilante para mantener la inflación baja y estable, y que las medidas adoptadas para proteger al peso están funcionando.
«El Banco de México, tengan la seguridad, hará todo lo que está en nuestro instrumental para que se perpetúe esta circunstancia» de inflación baja y estable, dijo Carstens.
El principal riesgo inflacionario es que la fuerte depreciación del peso se agudice y se traslade a los precios de los bienes y productos básicos.
El gobierno ha «reforzado» los mecanismos de intervención en el mercado cambiario, lo cual atenuó la caída de la moneda, que se ha visto presionada principalmente por las expectativas de que la Reserva Federal de Estados Unidos suba pronto su tasa de interés de referencia.
«Vamos a continuar evaluando permanentemente las circunstancias para tomar las medidas oportunas que se requieren», dijo Carstens.
Banxico recortó la semana pasada su pronóstico para el crecimiento económico del país para este año, pero está dispuesto a elevar la tasa de interés de referencia para evitar presiones en la inflación, derivadas de la caída del peso.
El banco central dejó estable la tasa clave el 30 de julio, en medio de un deterioro del panorama económico local, ocasión en la que advirtió que prevalece el riesgo de que la baja de la moneda contamine las expectativas inflacionarias.
El peso mexicano, que se ha depreciado casi un 12 por ciento en lo que va de 2015, tocó un piso histórico de 16.55 por dólar.
(Reuters)