La movilización registró un 95 por ciento de participación nacional y reunió a más de 30 mil maestros en Buenos Aires contra el ajuste salarial.
Por Fabiola Rocha
Regeneración 04 de abril del 2016.- La movilización docente en Argentina aglutinó hoy, 4 de abril, a más de 30 mil docentes en una marcha en Buenos Aires y al menos el 95 por ciento de paro laboral en todo el País.
Con el pretexto de la conmemoración del noveno aniversario luctoso de Carlos Fuentealba, profesor y militante de izquierda asesinado en Neuquén, los maestros salieron a las calles para protestar por el ajuste a su salario, la falta de apoyo a las movilizaciones en las provincias, el insostenible pago de los fondos buitre y el alza en los servicios, entre otras razones.
Para los profesores, el gobierno macrista está utilizando los fondos del Estado para solventar pagos de deuda cuando debería invertirlo en la educación. Prueba de ello es la desaparición de coros y orquestas infantiles y juveniles; la falta de continuidad a programas de igualdad, y el insuficiente aumento salarial de 35 por ciento en comparación con la inflación registrada en el País.
Tan solo en este mes se aprobó el aumento de transporte, gas, luz, agua, desde el 100 y hasta el 500 por ciento en algunos casos; mientras los salarios aumentaron 35 por ciento y dividido en dos cuotas, una pagada este mes y otra parte proporcional pagadera en agosto-septiembre del año en curso.
“El sueldo básico es de 3500, una miseria”, dijo la profesora de primaria Inés Zeta quien aclaró que los aumentos se registran “en negro”, es decir, que no se fiscalizan como parte de su sueldo.
Pero estos tratos no son nuevos, en los 90, se implementó la flexibilización laboral que relajó las obligaciones de los patrones para con sus empleados lo que propició que los maestros registren determinadas ganancias, pero pagadas como “incentivos laborales”, los cuales no figuran dentro del conteo para jubilación o aguinaldo: una forma de entregar dinero contante y sonante a los profesores reduciendo sus derechos laborales.
“El Estado, como patrón, es el principal empleador en ‘negro’”, siguió Zeta, “hacen contratos basura o por locación de obra”, es decir, contratos temporales para tareas específicas, pero “hay trabajadores que llevan 10 o 15 años trabajando en locación sin que se les reconozca la antigüedad”.
En México, la reforma educativa trata de crear condiciones parecidas a las de Argentina hoy, pues los maestros tendrán un sistema de aumentos salariales basados en “evaluaciones docentes”; estos pagos también serán “incentivos”, por lo tanto no se contarán como parte de su sueldo y situarán al trabajador docente como un empleado precario en detrimento de la propia educación.
La movilización nacional docente se da a tan sólo once días de la marcha por el 40 aniversario del Golpe de Estado en la que organizaciones de todos los sectores se pronunciaron contra Macri, y se suma al clima de insatisfacción general por la ola de despidos en el sector público argentino y el alza indiscriminada de los servicios en contraposición con los aumentos salariales en todos los sectores.