Szymon Sidor, blogger y científico de computación, ha expuesto de forma clara en el vídeo que acompaña la noticia un importante agujero de seguridad en Android, gracias al cual sería posible espiar al usuario afectado de forma permanente sin que éste se dé cuenta.
El método se basa en una aplicación de cámara que consigue captar imágenes de forma periódica tanto de la cámara trasera como de la cámara frontal del terminal, que posteriormente son enviadas y almacenadas automáticamente en un servidor determinado.
La aplicación trampa consigue pasar totalmente desapercibida, puesto que no aparece como aplicación corriendo en segundo plano.
En el vídeo podemos ver que la aplicación tampoco muestra nada en pantalla y lo cierto es que sí lo hace, aunque resulta indetectable ya que sólo ocupa un tamaño 1 x 1 píxel. Finalmente debemos destacar que la aplicación también envía información sobre la batería restante del smartphone afectado, de forma que sea posible detener su ejecución en ciertos momentos para no levantar sospechas.
Información: Muy Computer