Por Amnistía Internacional* Las autoridades mexicanas han hecho un ínfimo y vergonzoso progreso en sus investigaciones relacionadas con la desaparición forzosa de 43 estudiantes del Estado de Guerrero, dijo hoy Amnistía Internacional, seis meses después de la tragedia.
“El pasado lapso de seis meses ha sido un periodo de devastación y tormento para las familias y los amigos de aquellos forzados a desaparecer el pasado septiembre. A pesar de la atención mundial en el caso, las autoridades mexicanas han fallado en perseguir como debe de ser todas las líneas de investigación, especialmente las preocupantes alegaciones de complicidad por parte de las fuerzas armadas”, dijo Erika Guevara-Rosas, Directora del Programa Regional de Amnistía Internacional para América.
“Seis meses antes de que los estudiantes desaparecieran nos preocupaba su seguridad. Seis meses atrás sentíamos frustración y tristeza por la falta de progreso en la búsqueda de sus paraderos. Pero ahora, seis meses después, sentimos verdadero horror por el abyecto fracaso del gobierno mejicano para encontrar toda la verdad sobre qué les pasó a esos hombres jóvenes, y llevar a los responsables ante la justicia.”
Las investigaciones sobre las desapariciones se han estancado y fracasado. Cuando restos humanos fueron encontrados en un basurero y río en Cocula en noviembre, el para entonces fiscal Jesús Murillo Karam anunció que se preparaban a cerrar el caso. Para entonces y ahora las pruebas de ADN practicadas a los cuerpos habían identificado sólo a uno de los estudiantes, dejando el destino y paradero del resto en vilo.
El 3 de marzo, México nombró una nueva fiscala, Arely Gómez González. Desde entonces ella ha venido diciendo que esta desaparición es un “caso aislado”. Sin embargo, estos 43 estudiantes son apenas los últimos de una larga lista de personas desaparecidas. De acuerdo con las cifras oficiales, más de 25.700 personas siguen desaparecidas en México en los últimos años y casi la mitad de todos durante la actual administración de Peña Nieto.
México, Regeneración, 26 de marzo del 2015. Fuente: Comunicado de Prensa de Amnistía Internacional
Foto: archivo de Amnistía Internacional