«Soy bastante bueno en aritmética. Sé que la batalla que tenemos por delante es muy, muy difícil, pero vamos a seguir luchando por cada voto y cada delegado», prometió el candidato Sanders. “Entendemos que nuestra misión aquí va más allá de derrotar a Donald Trump; es transformar a nuestro país», declaró el senador Bernie Sander.
Regeneración, 8 de junio de 2016. A pesar de que la nominación de Hillary Clinton con candidata presidencial por el Partido Demócrata parece asegurada. Sin embargo Bernie Sander declaró que la lucha continúa y se mantiene en campaña.
Es que después de este martes la exsecretaria de Estado se declaró vencedora y celebra como la primera mujer candidata a la presidencia por uno de los principales partidos de EU. Este martes Clinton se impuso en las primarias de Nuevo México, Dakota del Sur y California.
«Vamos a pelear duro para ganar la primaria de Washington D.C.», dijo el senador, Bernie Sanders ganó en Montana y Dakota del Norte y empató en Nuevo México el martes, cuando logró imponerse a Clinton en los estados de Dakota del Norte y Montana.
«Soy bastante bueno en aritmética. Sé que la batalla que tenemos por delante es muy, muy difícil, pero vamos a seguir luchando por cada voto y cada delegado», prometió el candidato Sanders.
Delegados y superdelegados
Hasta el momento, Hillary Clinton ha logrado 2 mil 203 delegados electos en las primarias demócratas; además cuenta con el apoyo de 574 “superdelegados”, con lo que suma 2 mil 777 delegados (el mínimo para ser nominado es de 2 mil 383 delegados). En tanto que el senador Bernie Sanders ha logrado mil 828 delegados electos en las primarias y cuenta con el apoyo de 48 superdelegados, con lo que totaliza mil 876 delegados rumbo a la Convención Demócrata del 25 de julio que elegirá a quien será el candidato encabezará al Partido Demócrata en las elecciones presidenciales del noviembre.
La primaria de Washington DC, que se celebrará el 14 de junio, es la última de la contienda y solamente están en juego 46 delegados.
Pero la campaña de Sanders también se ha dicho dispuesta a competir por los llamados superdelegados», como se conoce a los 719 votantes de la convención que no son electos por voto popular.
No todos están seguros de que los simpatizantes de Sanders apoyarían a Clinton en las elecciones generales.
«Los superdelegados no votan hasta el 25 de julio y de aquí a esa fecha pueden cambiar de opinión», dijo el vocero de la campaña, Michael Briggs, a través un comunicado.
«Nuestro trabajo de aquí hasta el final de la convención es convencer a esos superdelegados de que Bernie es, por mucho, el mejor candidato contra Donald Trump», agregó Briggs.
Aunque la insistencia de Sanders en no abandonar la contienda no parece responder únicamente por cálculos electorales.
«Llevaremos nuestra lucha por la justicia social, económica, racial y medioambiental hasta (la convención de) Filadelfia», les prometió el martes a sus simpatizantes.
Y ese interés en utilizar las primarias para tratar de forzar la inclusión de ciertos temas en la agenda del Partido Demócrata ha sido una de las constantes de su campaña.
Influencia
A fines de abril, por ejemplo, cuando las victorias de Clinton en otro «supermartes» también parecían haber confirmado que no conseguiría la nominación, Sanders emitió un comunicado en el que tácitamente admitió la derrota, pero expuso sus motivos para continuar hasta el final.
«Las personas de cada estado del país deben tener el derecho a determinar a quién quieren como presidente y cuál debe ser la agenda del Partido Demócrata», dijo en ese momento.
Bernie Sanders no sólo quiere ganar la nominación: también quiere transformar a su partido y a Estados Unidos.
«Es por eso que estaremos en esta carrera hasta que se deposite el último voto. Es por eso que esta campaña irá a la Convención Nacional Demócrata en Filadelfia con la mayor cantidad posible de delegados para luchar por una plataforma progresista», agregó el precandidato.
«Entendemos que nuestra misión aquí va más allá de derrotar a Donald Trump; es transformar a nuestro país», declaró el senador, quien tiene previsto reunirse el jueves con el presidente Barack Obama.
La plataforma progresista de Sanders:
- Un salario mínimo de US$15 la hora
- El final de «nuestras desastrosas políticas comerciales»
- Un seguro de salud para todos
- La ruptura con las instituciones financieras de Wall Street
- El final del fracking en EU
- Gratuidad de las facultades y universidades públicas
- La aplicación de un impuesto al carbono para que «se pueda abordar de forma efectiva la crisis planetaria del cambio climático»
Sanders se reunirá con Obama
Según la Casa Blanca, la reunión –solicitada por el propio Sanders– tiene como objetivo hablar acerca de «cómo aprovechar el extraordinario trabajo que ha hecho para movilizar a millones de votantes demócratas y aprovechar ese entusiasmo».
Y el mismo Sanders recordó que uno de los objetivos centrales de su campaña es «no permitir los derechistas republicanos controlen el gobierno».
Obama no se ha decantado públicamente por ninguno de los candidatos, pero ya llamó a Clinton para felicitarla «por haber conseguido los delegados necesarios».
«Estamos en esto juntos», dijo el senador, en lo que muchos han interpretado como un primer paso para algún tipo de acuerdo con Clinton.
Y la virtual nominada ya empezó a tratar de convencer al senador de que sus preocupaciones serían atendidas por su candidatura.
«No nos equivoquemos, el senador Sanders, su campaña, y el vigoroso debate que hemos sostenido acerca de cómo aumentar los ingresos, reducir la desigualdad, aumentar la movilidad social, han sido muy buenos para el partido Demócrata y para Estados Unidos», dijo Hillary Clinton.
«Empecemos a mirar hacia adelante recordando las cosas que nos unen», pidió.
Y el exjefe de estrategia de Obama, David Axelrod, resumió todo así en su cuenta de Twitter: «Las primarias de hoy ya no tienen que ver con la nominación. Buscan influir en las conversaciones de paz que seguramente seguirán (a las mismas)».
Con información de BBC Mundo.