Un equipo internacional de físicos construyó un laboratorio en el que la ‘flecha del tiempo’ apunta en reversa.
Regeneración, 09 de enero de 2018.- Un equipo internacional de físicos, liderado por Kaonan Micadei, físico de la Universidad Federal ABC, en Brasil, se preguntó qué sucedería si se modificaran las reglas de tiempo y se lograra determinar su dirección (hacia adelante o hacia atrás); y logró, por primera, vez construir un sistema con las características adecuadas para modificar la flecha del tiempo.
La dirección de la “flecha del tiempo” fue nombrada por el físico Arthur Eddington, a principios del siglo pasado, quien notó que a nivel macroscópico, los sistemas parecían “elegir” moverse únicamente hacia el futuro.
Y es que las partículas subatómicas, de las que todo y todos estamos hechos, no se rigen bajo esa “flecha del tiempo”, es decir son simétricas con respecto al tiempo, funcionan con igual independencia ya sea que el tiempo transcurra hacia adelante o hacia atrás. Sin embargo, al pasar al nivel macroscópico, tienden a ir hacia el futuro.
La lógica de los sistemas macroscópicos y su obediencia al tiempo, es que el Universo primitivo estaba muy caliente y su energía se distribuía uniformemente por todas partes, pero en un estado de baja entropía (magnitud termodinámica que indica el grado de desorden molecular de un sistema), dominado por la gravedad, se determina la flecha del tiempo hacia una sola dirección.
Con estos conocimientos, Micadei se preguntó qué pasaría si lograra construir un sistema cerrado cuyas condiciones iniciales obliguen a la flecha del tiempo a ir en dirección contraria y lo logró.
“Efectivamente, en su experimento la flecha del tiempo apunta en dirección contraria, permitiendo a los investigadores comprobar cómo un objeto frío es capaz de aportar calor a otro más caliente, algo impensable en nuestra realidad cotidiana”, cuenta Abc en un artículo, en el que cita el trabajo de Micadei, publicado por arXiv.org.
La investigación, por supuesto, no nos permitirá emprender un viaje al pasado para ver dinosaurios, pero sí que podría decirnos por qué nuestro Universo está «atrapado» en una calle de un solo sentido.
«Nuestros resultados sobre la flecha termodinámica del tiempo -explica Micadei- podrían también tener estimulantes consecuencias sobre la flecha cosmológica del tiempo». Lo cual da a entender que procesos parecidos a los descritos en su experimento podrían ser responsables de las condiciones iniciales del Universo, el sistema en que vivimos, y explicar por qué el tiempo fluye en la dirección que observamos.